Los futbolistas endurecieron su postura en Agremiados y ratificaron el paro.
En la sede del gremio de la calle Salta, los máximos referentes de los clubes de Primera se reunieron con el secretario general, Sergio Marchi y resolvieron que el fútbol no arranque.
El primero en confirmarlo fue el capitán de Vélez, Fabián Cubero, quien dijo que “no hay fútbol”. “Hasta que la plata no esté en las cuentas de los jugadores no se va a jugar”, informó al salir del multitudinario cónclave en el edificio de la calle Salta.
Los jugadores debían tomar una decisión fuerte: mantenerse firme en el paro y no reanudar el campeonato como estaba estipulado (están programados para este viernes los duelos Rosario Central-Godoy Cruz y San Lorenzo-Belgrano) hasta que los clubes salden las deudas con los jugadores o levantar la medida de fuerza. Está claro que ganó la primera postura.