La película perfecta para deslumbrarse con Jesse Eisenberg

Jesse Eisenberg , uno de los pocos hallazgos de A Roma con amor y que ahora actúa en Café Society.

En la época de oro de Hollywood los actores tenían que cumplir con ciertas características físicas para ser protagonistas de historias románticas. Galanes como Clark Gable o Cary Grant eran los que enamoraban a las mujeres, tanto en la ficción como del otro lado de la pantalla, hasta fines de los 60. Tras la revolución del Nuevo Hollywood, con actores como Dustin Hoffman se amplió el concepto de qué tipo de hombre podía ser un protagonista romántico; lamentablemente, algo que nunca sucedió con las actrices.

Woody Allen fue uno de los que quebró el paradigma del buen mozo y elegante como galán, escribiéndose guiones en los que hermosas mujeres se enamoraban de él, protagonizándolos y dirigiéndolos. Pero a medida que pasó el tiempo, el director de Annie Hall tuvo que buscar actores más jóvenes que lo reemplazaran. Entre los mejores que encontró está Jesse Eisenberg , uno de los pocos hallazgos de A Roma con amor y que ahora actúa en Café Society.

El actor de Adventureland, La red social y Tierra de zombies se dedica a interpretar personajes más o menos tímidos incluso con problemas para adaptarse a lo social, y su talento le permite darle matices inesperados de modo que su presencia en la pantalla siempre resulta atractiva. En este nuevo film de Allen, sus cualidades quedan claras, sobre todo por la fluidez con la que encarna la transformación del personaje. Como sucede con Allen, Eisenberg tampoco tiene el look clásico de galán. Pero a diferencia del director, cuyo talento pasa por otro lado, el actor logra deslumbrarnos y en la segunda mitad de la película nos convence de que es capaz de despertar las pasiones de dos mujeres divinas y codiciadas comoKristen Stewart y Blake Lively .