En su descargo dijo que fue una “tontería”. Pero para la Justicia no fue algo banal: la mujer que tuiteó un mensaje intimidante contra Antonia Macri, la pequeña hija del presidente, quedó hoy al borde del juicio oral luego de que la Cámara Federal confirmara su procesamiento.
Maribel Anahí Durand, de 27 años, ex contratada del Ministerio de Desarrollo Social, había escrito en su cuenta de Twitter: “Nuestro odio lo calmaremos con sus hijos” y “Espero que @mauriciomacri le dejeguardaespalda de por vida a Antonia”, acompañado con una foto de la niña con una tachadura en su cuello.
“Si algo hizo mal el kirchnerismo es no haber matado a toda la burguesía, periodistas y políticos de derecha, en sus 12 años de gestión”, fué otras de las frases que volcó en las redes la acusada. La mujer explicó que había sido una tontería y había escrito eso porque tenía bronca tras haberse quedado sin trabajo.
La Sala II de la Cámara Federal comunicó: “Amén de cuáles fueron las motivaciones previas de la imputada, hay indicios que muestran previsibilidad, conocimiento e intención de concretar de forma anónima los mensajes intimidantes. Ello es suficiente para confirmar el procesamiento”.
EL FALLO
En el fallo los jueces Eduardo Farah y Martín Irurzun sostuvieron que “no existe discusión en torno a que, durante los días 3 y 4 de marzo del corriente año, la encartada realizó diversas publicaciones en la red social Twitter, una de las cuales estaba dirigida directamente al perfil ‘@mauriciomacri’ –usuario oficial del actual Presidente de la Nación,Mauricio Macri, en esa red–, mientras las restantes tenían como destinatarios a la totalidad de los usuarios”.
La propia acusada reconoció haber escrito los mensajes, pero la Cámara Federal señaló que “ni la materialidad de los sucesos ni la calificación que les asignó el juez se hayan controvertidas” y descartó la falta de dolo (intención) en la conducta de la joven.
“Es claro que no se trató de una mera expresión de ideas al público en general o de un exabrupto sin repercusiones reales. Nótese que el mensaje anónimo fue dirigido directamente al canal de comunicación utilizado por Mauricio Macri y registrado en esos términos; que contuvo una amenaza cierta y concreta a la vida de su hija menor de edad –incluso empleó una foto de ella con una tachadura en su cuello–; y que a raíz de aquel -según se averiguó- se activaron mecanismos para reforzar la seguridad de la familia presidencial”, se advirtió.
