Hace años que la ciencia se plantea la posibilidad de concretar una droga que potencie la actividad cerebral y aumente la lucidez en situaciones de estrés. En el último tiempo, circularon diferentes fármacos que aseguraban esos efectos, pero ninguno recibió el aval necesario de la comunidad médica.
“Un viagra para el cerebro”, fue la descripción que recibió la pastilla NeuroFuse por parte de la industria farmacéutica. Se trata de un suplemento cerebral de avanzada que -aseguran- incrementa la actividad cognitiva en forma notoria. De acuerdo a la opinión de los expertos, podría ser el potenciador del cerebro más poderoso del mundo.
A partir de la exitosa película Limitless (“Sin límites”), emergió la posibilidad de que un fármaco proveyera enormes capacidades intelectuales y de lucidez en situaciones extremas. En el film, su protagonista, Bradley Cooper, toma una droga ficticia llamada NZT-48 que le otorga facultades excepcionales para resolver todo tipo de problemas.
“Bienvenidos al futuro”, exclamó el doctor Raqif una vez que presentó a la pastilla en el programa norteamericano del que forma parte, “The Doctors”. Según sus creadores, el NeuroFuse no registró efectos secundarios en los ensayos y pruebas clínicas realizadas. Sin embargo, la comunidad médica desconfía de este tipo de medicamentos.
Por caso, Bejamin Zand, un joven inglés probó una de las pastillas inteligentes a principios de 2016 y los efectos fueron completamente nocivos. El primer día, Zand notó un aumento en su concentración, pero ya al segundo descubrió, por ejemplo, un bulto en la parte de atrás de su pierna que le molestaba y picaba. La píldora, además, le imposibilitaba conciliar el sueño: “Tenía un aspecto terrible”, describió.
A su vez, las pastillas inteligentes abrieron un debate en torno a su consumo ya que algunos círculos académicos consideran “injustas” las ventajas de su utilización. El tema se instaló también como una discusión acalorada en los medios de comunicación estadounidenses.
Pese a que el NeuroFuse es la última novedad, hace ya algunos años que salen al mercado distintas píldoras que buscan potenciar el rendimiento neuronal. De hecho, otro fármaco, el BrainPlus, estuvo prohibido para su comercialización durante tres años hasta que después de numerosos litigios lograron la permisión de su venta exclusivamente a través de su sitio web.
Los fármacos demostraron efectos beneficiosos, sobre todo, en personas entre 18 y 35 años, a raíz de un gen ubicado en el cerebro humano de nombre NRXN3 que amplifica sus capacidades. Para verificar su potencial, Alan Frasier, editor del suplemento de Salud y Ciencia de NBC, consumió durante cuatro semanas la pastilla inteligente:
Primera semana
“Unos 30 minutos después de tomar mi primera píldora, sentí los efectos. Todo comenzó con una ola agradable de calma que se apoderó de todo mi cuerpo como una manta caliente. La niebla mental y el estrés que había estado cargando desaparecieron instantáneamente. Al poco tiempo, llegué a un nivel de alerta y concentración que nunca había experimentado antes. No registraba ni un sonido. Era como caminar en un día de invierno después de que nevara. Se me hizo fácil ignorar las distracciones y los ruidos del exterior. Lo mejor de todo, no había ninguno de los efectos secundarios negativos como sí tuve a la hora de tomar Adderall (otra conocida ‘pastilla de la inteligencia’)”.
Segunda semana
“Estaba un poco preocupado de que NeuroFuse dejara de funcionar después de una semana. No fue así. Me siento incluso más concentrado y con más energía que antes. Después de una jornada de trabajo de 10 horas mis niveles de energía siguen siendo elevados, pude terminar todas las tareas para el día. NeuroFuse mejoró mi capacidad de concentrarme y no hizo absolutamente ningún cambio en mi dieta, ejercicio o programa de trabajo”.
Tercera semana
“El efecto de NeuroFuse todavía estaba conmigo y me sentía muy contento con el número de tareas que había podido realizar. Anteriormente, había tenido problemas para iniciar y completar tareas. La pastilla me mantiene centrado en el trabajo. Me di cuenta durante toda la semana de que casi nunca estuve estresado, y fui capaz de controlar mis emociones sin perder el foco. Esperaba perder fuerza alrededor de la tercera semana debido a que mi cuerpo se acostumbrara a los ingredientes. Pero mis niveles de energía no han bajado en absoluto. Siguen siendo constantes durante todo el día”.
Cuarta semana
“Me apodaron ‘Superman’ en la oficina, ya que me he convertido en el miembro más productivo del personal. Le doy todo el crédito a NeuroFuse. La droga funciona tan bien esta semana, como lo había hecho en semanas anteriores. Mi mente es cristalina y soy capaz de tener recuerdos almacenados con una precisión casi perfecta. Es increíble lo mucho que ha cambiado en tan sólo 4 semanas. No es que me convertí en un genio de la noche a la mañana después de tomar NeuroFuse, pero definitivamente ha mejorado mi memoria y la velocidad para procesar nueva información”.