El paso del presidente de la Nación, Mauricio Macri , por la ciudad olímpica tiene casi el ritmo de Usain Bolt en los 100 metros. Llegada en la tarde-noche de ayer y el tiempo justo para prepararse para la noche de gala que el Comité Olímpico Internacional (COI), encabezado por el alemán Thomas Bach, organizó en el hotel Windsor Oceánico, en Barra de Tijuca, con otros jefes de Estado y de gobierno. Instantes antes de abandonar el hotel Hilton junto con su esposa, Juliana Awada, el presidente habló sobre su presencia en la apertura de los Juegos Olímpicos de Río 2016 , los primeros de la historia en celebrarse en América del Sur. Y a la vez, se refirió a una posibilidad futura, que ya transmitió Bach con sorprendente énfasis y que contó con la entusiasta aprobación del Comité Olímpico Argentino: que nuestro país sea la sede de los Juegos en 2028 o 2032.
Macri es uno de los 28 presidentes que estarán presentes hoy en la ceremonia de apertura de Río 2016. De la región, estará además Horacio Cartés, máximo autoridad de Paraguay. Macri llegó anoche, acudió a la cena del COI, este mediodía brindó una entrevista en TyC Sports en la que charló con Juan Martín del Potro y con Facundo Conté, a quien le anticipó que mañana, a las 8.45, visitará la Villa Olímpica.
-Seguramente debe ser un momento muy especial para usted, estar acá en Río de Janeiro, para acompañar a una delegación récord, histórica en cantidad de participantes, de la Argentina, con 213 atletas.
-Primero, estoy feliz de estar acá acompañándolos. Creo que se comenzó un trabajo muy positivo hace varios años y que cada vez va a ir dando mejores resultados de nuestras representaciones en los deportes olímpicos. Y a la vez desearles el mayor de los éxitos a todos. Que compitan con dignidad, con respeto, con mucha y buena energía.
-¿No se va a quedar para ver ninguna competencia?
-No, sólo la ceremonia inaugural y el sábado ya me vuelvo a Buenos Aires.
-Cuando el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, manifiesta que la Argentina tiene serias posibilidades de ser sede olímpica, y el Comité Olímpico Argentino quiere hacerlos, ¿usted qué dice?
-Es un proyecto que se transforma en un gran desafío para todos los argentinos. Tenemos varios años para prepararnos. Pero primero hay que organizar bien los Juegos Olímpicos de la Juventud, que ya es un desafío inmediato.
-¿Pero le interesaría hacerlos o le parece una quimera?
-Me parece que en un proyecto austero, sin querer competir en la construcción de estadios gigantescos y carísimos, se puede encarar. Hay que encararlo teniendo en cuenta que el país tiene otras prioridades, que arrancan por reducir y terminar con la pobreza después de algunos años de trabajo.
-¿Qué lecciones se aprende después de lo que fue la organización de Brasil?
-Es complejo, hay que apoyar a los brasileños. No me gustó sentir tantas críticas para un país hermano que ha hecho un enorme esfuerzo a pesar de la crisis política que están viviendo para recibir al mundo entero en estas olimpíadas.