La COP22 le marca la cancha a Estados Unidos

En el cierre del encuentro, advierten a Trump que "nadie puede detener la historia"

La cumbre de cambio climático (COP22) comienza a bajar el telón. Con una declaración política internacional que le marca la cancha a los Estados Unidos ante la indefinición de su postura respecto del Acuerdo de París, dejó claro que el proceso de reducción de emisiones contaminantes sigue en marcha, pero tiene sabor a poco.

Aunque no hubo avances sustanciales en temas de financiamiento y adaptación, luego del shock de la primera semana tras los resultados electorales estadounidenses que dieron la victoria a Donald Trump, las negociaciones se encaminaron. “Nadie puede detener la historia”, dijo Salaheddine Mezouar, ministro de Relaciones Exteriores de Marruecos, que preside esta cumbre. Él fue el mismo que anunció anoche la Proclama de Marrakech por la que unos 200 delegados reclamaron “de forma urgente la necesidad de elevar la ambición de los países en la lucha contra el cambio climático que, según han destacado, vive un impulso irreversible”.
Hasta ayer 111 países habían ratificado el Acuerdo de París que comenzó a funcionar tempranamente el 4 de este mes. En él, se comprometen a reducir la emisión de gases contaminantes para 2020. Sin embargo, aunque todos cumplieran no lograrían detener el aumento global de la temperatura en 2 grados centígrados sino que llegaría a 2,7 grados C. Según los expertos, superar el límite de 1,5 grados C para 2100 implicaría pérdidas irreversibles para los países que son islas y para ecosistemas delicados como los corales.

Carlos Gentile, Subsecretario de Cambio Climático y Desarrollo Sustentable en Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Argentina opinó : “Esta COP cumplió con su mandato básico de organizar el trabajo para los próximos cinco años, pero no pudo ir más allá”.
En el texto los delegados hacen un llamamiento “al más alto compromiso político” para combatir el cambio climático como una prioridad “urgente” y apelan a una “fuerte solidaridad” con los países más vulnerables a los impactos del calentamiento. Del mismo modo, subrayan la necesidad de apoyar los esfuerzos encaminados a mejorar su capacidad de adaptación, fortalecer la resistencia y reducir la vulnerabilidad.

Financiación

En cuanto a la financiación, llaman a aumentar el volumen, el flujo y el acceso a la financiación para proyectos climáticos, junto con la mejora de la capacidad y la tecnología, incluyendo desde los países desarrollados hasta los países en desarrollo. En este sentido, los países desarrollados reafirmaron en Marrakech su “meta” de movilizar 100.000 millones de dólares anuales y piden “más acción y apoyo climático mucho antes de 2020”, teniendo en cuenta las “necesidades específicas” y “las circunstancias especiales” de los países en desarrollo, los países menos adelantados y aquellos particularmente vulnerables a los efectos adversos del cambio climático.
En ese sentido una de las grandes deudas que tiene el proceso es el dinero que se destina para las políticas de adaptación al cambio climático, que son aquellas que apuntan a la resiliencia. Según las cifras que se conocieron en esta reunión apenas, suman el 25% de la inversión. Para mitigación, medidas que pretenden bajar las emisiones como trasnformar la producción de energía, ascienden al 72 por ciento.

Enrique Maurtua Konstantinidis, especialista en cambio climático de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales, dijo : “La COP de Marruecos debe acompañar el momento de inercia que dio la ratificación temprana. Aunque mucho pasos se dieron en la dirección correcta (procesos, daños y pérdidas y algo de financiamiento) todavía falta que en los proximos años los números sean más claros y que los paises realmente puedan aumentar la ambición en los próximos 2 años. Los paises mostraron que el Acuerdo de Paris será implementado sin importar las dificultades.”

Desde los países en vías de desarrollo también hubo una señal: un grupo de 47, entre los que no está Argentina, se comprometió a impulsar políticas de 100% energías renovables.

Por: Laura Rocha