Nicolás Maduro ya lo había anticipado: la primera medida de su Asamblea Constituyente iba a ser “tomar” la Fiscalía, en manos de la chavista disidente Luisa Ortega, que había denunciado la “ambición dictatorial” del mandatario y la “ruptura del orden democrático” en Venezuela. Y así fue, en su primera sesión este sábabdo, constituyente destituyó a Ortega, que será sustituida temporalmente por el Defensor del pueblo Tarek William Saab.
Pocos minutos antes, Ortega había sido suspendida del cargo por decisión de la Corte Suprema, que la enjuiciará por irregularidades en su cargo y esta mañana decenas de militares rodearon el Ministerio Público para impedirle el ingreso a la Fiscalía.
“Esto es una dictadura, el atropello que se está viviendo en Venezuela, la represión, no solamente que están deteniendo arbitrariamente a las personas, sino que los procesan con justicia militar, sino ahora no dejan entrar a la fiscal general a la sede principal”, había dicho a periodistas.
Diosdado Cabello, un poderoso dirigente del chavismo y miembro de la Constituyente, propuso ante el plenario separarla del cargo definitivamente. “Ante el inexorable vacío que existe allí en ese momento (…), propongo que sea removida de su cargo la señora Luisa Ortega Díaz, no suspendida. Aquí no es un linchamiento personal, político, sino cumplir con la ley”, indicó.
