Sintonía americana: Después de varios años de una fructífera sociedad artística con el dibujante e historietista Liniers, Kevin Johansen volvió a cortarse solo y está de regreso con Mis Américas Vol. ½, su más reciente trabajo discográfico que, tras recibir tres nominaciones a los Premios Grammy Latinos 2016, tuvo su presentación oficial en vivo en un teatro Opera Allianz colmado de seguidores ávidos por escuchar sus flamantes creaciones además de sus grandes éxitos. En este nuevo álbum, el ex Instrucción Cívica vuelve a poner de manifiesto su ya conocida y celebrada intención de no atarse de manera férrea a ningún estilo y dejarse llevar, en este caso, por los diferentes caminos musicales del vasto continente americano que supo y sigue recorriendo tanto por su historia de vida nómada como por las giras que le demanda su trayectoria profesional. De ahí que se mueva más que cómodo por el pop, la canción intimista, el hip hop, la bachata, el country folk, el jazz, el bolero y todos los géneros que se le crucen por delante con una soltura y un desprejuicio notables.
El poder del humor: Acompañado por The Nada, su numerosa, ajustada y versátil banda donde reluce el experimentado baterista Enrique “Zurdo” Roizner, y una puesta escénica sumamente sobria quizás con el objeto de que la mirada y el oído se concentren de forma exclusiva en lo musical, Johansen aúna su amplia paleta de colores a través de su reconocible registro vocal de barítono y, sobre todo, de la utilización del humor, la ironía y los juegos de palabras como recursos fundamentales para narrar sus historias cotidianas de amores y desamores, de ciertos comportamientos propios de los argentinos y de algunos personajes pintorescos de aquí y de allá. Esas mismas simpatía y picardía son las que lo conectan con su público desde el escenario mediante pequeños diálogos entre uno y otro tema y generando un constante ida y vuelta.
Todo queda en familia: Uno de los lujos que Kevin se permitió durante la grabación de este disco fue el de cantar junto a sus hijos Miranda, Kimi y el pequeño Tom Atahualpa Johansen. Sobre el amplio escenario del Opera fueron las chicas las que dijeron presente: Kimi aportó toda su dulzura en “Everything is everything” y la pegadiza “Folkie” mientras la mayor, Miranda, hizo coros en varios pasajes y se lució en “Es como el día” con los tonos cálidos y diáfanos de su voz.
Invitados con calor latino: Marcos Mundstock, Palito Ortega, Ricado Mollo, Arnaldo Antunes y Pity Alvarez fueron algunos de los muchos invitados ilustres que participaron en Mis Américas Vol. ½ pero que, por diferentes compromisos profesionales, no pudieron acompañar al anfitrión en esta presentación en vivo. Sin embargo, las presencias de la siempre energética Miss Bolivia rapeando en “Dios de la marea” y del “Macha” Aldo Asenjo, de la agrupación chilena Chico Trujillo, sumando su romántica voz al bolero “El jardín del desdén” agregaron calor latino a una jornada rica en texturas y sonoridades.
Venga a bailar: Más allá de los diferentes y sugerentes climas que la música del creador de “Down with my baby” propone, el costado rítmico y lúdico de su repertorio es el que despierta mayor contagio en su público. Y es ahí donde sobresalieron la festejada “La Bach-Chata (Habladurías)”, “Oh, what a waist”, “Torcer a favor” y “Daisy” para finalmente transformar al Opera en una gigantesca bailanta cool, con decenas de mujeres que saltaron de la platea al escenario bailando al ritmo de Cumbiera intelectual” y “Guacamole”. Sin dudas, un cierre a pura fiesta popular.