El volante de Boca Juniors Ricardo Centurión deberá dar explicaciones por el choque entre un auto importado que está registrado a su nombre y otros tres vehículos que sufrieron el descontrol del primero en un incidente ocurrido en la madrugada del domingo en la localidad de Avellaneda, agravado porque el conductor del auto alemán huyó del lugar.
Los testimonios son confusos pero la reconstrucción inicial da cuenta de que un auto BMW blanco dominio HQH 464 impactó contra un Fiat Duna (CAP 491) que era conducido por Ignacio Rubén González, según los primeros informes de los efectivos de la comisaría 1° de Avellaneda que acudieron a la calle Alsina y el Puente Agüero (también conocido como los siete puentes) tras un llamado al 911.
Allí, el personal también constató que otros dos autos, un Fiat Siena blanco (KMV 236) y un Ford Fiesta Plus negro, quedaron involucrados en el hecho por el cual fue señalado Centurión, quien el sábado por la noche jugó el amistoso que Boca le ganó por 2 a 0 a Libertad de Paraguay (fue titular) y al regreso desde Chaco habría ido a un local bailable de la localidad de Lanús llamado Fiux.
Tras la estadía en el lugar, el jugador habría tomado el mando de su vehículo con otras cinco personas a bordo que fueron identificadas como Jonathan Acosta (22 años), Nazareno Vera (23), Iván Pérez (22), Ximena Giordino (22) y Yésica Denis Macedo (21). Al ser interrogados por la policía, los mencionados negaron que Ricardo Centurión fuera quien conducía y agregaron que era un “desconocido” con el que se cruzaron en el local bailable y se ofreció a llevarlos. Todo en el marco de la fuga del conductor del lugar de los hechos.
El BMW fue trasladado a la comisaría y aún permanece allí. Consultado sobre lo ocurrido, el representante del jugador, Hernán Fernández, manifestó al diario Crónica: “No tengo idea de lo que pasó, estoy tratando de averiguar”.
Así las cosas, Ricardo Centurión deberá dar explicaciones por lo ocurrido primero en la Justicia por los daños materiales y por las lesiones que denunciaron dos de los conductores de los vehículos impactados y luego en Boca al trascender que Guillermo Barros Schelotto está más que preocupado por la conducta del jugador fuera del club.
EN EL RADAR DE LOS PROBLEMAS
El del domingo por la madrugada no es el primer caso problemático para el ex Racing. Cuando jugaba en la Academia su figura tomó importante trascendencia a partir de su talento con la pelota y se conocieron entonces varias de sus historias íntimas.
La primera fue por una foto en la que se lo ve con un arma de fuego cuando tenía 16 años y que incluso motivó una pregunta de un periodista cuando fue transferido al San Pablo.
Allí también protagonizó algunos momentos conflictivos, como aquel en el que durante una estadía en la Argentina salió a bailar, se quedó dormido y perdió el vuelo con el que debía regresar a Brasil.
Como jugador del Tricolor tuvo un incidente con un rival durante un choque con Toluca donde cometió una desagradable acción.