La principal atracción turística de Chilecito por estos días no es el Cristo de Portezuelo ni las estaciones de la vieja mina de oro La Mexicana con una gloriosa vista al cerro Famatina, sino la escalera mecánica del flamante Centro Cultural y Comercial de Chilecito, que comienza a un metro del suelo.
La obra en la vieja estación de ómnibus de la segunda ciudad más grande de La Rioja costó más de 85 millones de pesos. Y aunque no estaba incluida en el proyecto original, los encargados de la obra decidieron colocar una escalara mecánica, la segunda de la provincia, que fue anunciada con bombos y platillos. Pero algo salió mal y la escalera se quedó corta.
El primero en informar su arribo a Chilecito fue el presidente de la Asociación Civil “Vieja Terminal”, Carlos Searez. “Se hizo construir una escalera de acuerdo a la disponibilidad del espacio que había”, precisó.
Según recuerda el Diario de Chilecito, la escalera llegó a la segunda ciudad más grande de La Rioja en enero, pero a falta de mano de obra local, se recurrió a la empresa chilena CORMED para hacer el montaje. El propio encargado de la obra, Jorge Urbine, dijo la semana pasada que “todo se hará rápido y entre sábado y domingo estará en movimiento la escalera”. Pero nada salió como esperaba. Y ahora están planificando cómo solucionar el problema en los cálculos.
Ya antes de su colocación, la escalera había generado ruido político porque el Concejo Deliberante no había autorizado su colocación. “Siempre denunciamos la falta de un procedimiento administrativo adecuado para que este centro se habilitara de la manera más correcta”, lamentó el edil Miguel Pedone, del Frente Cívico Riojano.
“Cada error que se comete le cuesta plata a los chileciteños; estamos hablando de una obra de infraestructura como lo es este shopping. Se ven los errores de construcción y la falta de control; no sabemos cómo van a resolver el tema de las escaleras, pero queremos que hagan algo y que dejemos de ser el hazmerreír de la obra pública en la provincia y en el país”, protestó el concejal.
A nivel provincial, el diputado Roberto Klor se quejó por la falta de planificación. “La escalera no estaba contemplada en la obra y además de no cumplir con las normas de seguridad, le falta un metro sobre el nivel del piso; han tomado mal las medidas”, opinó. “El shopping para los chileciteños significó algo muy lindo. Una obra que embellece el centro, aporta locales y sobre todo el cine, pero lo de la escalera es lamentable, da bronca por la gran inversión del Estado”, insistió.
“Ojalá que se pueda enmendar, pero debería haber un llamado de atención para quien hizo esto y en especial para quien controla la obra. No entiendo cómo se equivocaron, la empresa debería estar a cargo de algún ingeniero supongo y aparte el Estado tiene profesionales responsables de controlar la obra que es pública”, concluyó el diputado Klor.
Desde el oficialismo se mostraron confiados en que el problema se solucionará. Por ahora, el administrador del shopping pidió “paciencia”. E invitó a sus vecinos a “que vuelvan cuando la obra esté terminada y recién ahí emitan su opinión”.