En medio de la euforia tras conseguir su segunda Copa del Mundo, algunos hinchas franceses comenzaron a provocar incidentes en las calles de París. Como respuesta, las autoridades intentaron controlar la situación y liberaron la zona con gases lacrimógenos.
En la capital francesa fue donde más fanáticos se juntaron a ver la esperada final contra Croacia. Con camisetas, banderas y todo el color, los simpatizantes coparon el Arco del Triunfo y festejaron hasta que estallaron los incidentes.
En las inmediaciones de la avenida de los Campos Elíseos, unos treinta jóvenes saquearon un negocio, mientras los hinchas celebraban en la calle la victoria francesa. Los agresores, algunos encapuchados, irrumpieron en la tienda de la famosa avenida parisina, y luego salieron con botellas de vino y de champán bajo el brazo, grabándose con teléfonos celulares.
Un episodio similar se había vivido el martes pasado, cuando el conjunto galo le ganó a Bélgica y logró la clasificación a la final del Mundial. Cerca de la medianoche, los hinchas tuvieron fuertes cruces con las autoridades en el momento que estaban siendo dispersados por la policía.