Habrá una reunión entre el Gobierno, los movimientos sociales y la Iglesia

Diciembre, con todo lo que ese mes significa para el país, está a la vuelta de la esquina y es por eso que el Gobierno, transitando el mes de octubre, ya arma un plan de contención: al envío de fuerzas de federales al conurbano que empezó ayer, le sumará este miércoles la primera reunión tripartita entre Movimientos Sociales, Iglesia y Gobierno.

La reunión tendrá carácter formal porque será en el Ministerio de Desarrollo Social y la encabezará la ministra Carolina Stanley. Por el lado de las organizaciones estarán presentes Barrios de Pie (BP), la Confederación de los Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y la Corriente Clasista Combativa (CCC), los promotores de la populosa marcha de San Cayetano. Finalmente, por lado eclesiástico está confirmada, hasta el momento, la presencia de monseñor Fernando Maletti, que es el obispo de la zona caliente de Merlo/Moreno y quien fuera designado allí por el Papa Francisco.

“El Gobierno no termina de comprender la realidad social, aspiramos que de acá a fin de año, el Estado esté del lado de los más necesitados”, considera Daniel Menéndez, referente nacional de BP. Agrega: “Hay un deterioro social estructural que no pretendemos que se solucione en lo inmediato, pero todo se agrava por la falta de ingresos en las familias y esto hace desesperante diciembre que es la época del año en la que se cristalizan los problemas cuando no tenés nada para llevar a la mesa”.

¿Cuáles son sus reclamos?, preguntó Clarín.

“Queremos que el bono de 1000 pesos para beneficiarios de la AUH se otorgue por hijo y no por familia; también pediremos un aguinaldo social y que se mantenga de acá a futuro: si una persona cobra los 3400 pesos por el Plan Argentina Trabaja pediremos que en diciembre se pague otro importe igual en concepto de aguinaldo”, explica Menéndez. El pedido de la declaración de la Emergencia Social es otro caballito de batalla que estará en la mesa y por el que los movimientos sociales ya se juntaron con varios legisladores. Lo explica Juan Grabois, de la CTEP, para este diario: “La Ley de Emergencia Social implica la implementación de un salario social complementario para que ningún trabajador tenga ingresos inferiores al mínimo vital y móvil (hoy es de $7.560 y desde el 1° de enero será de $8.060), y la creación de un millón de nuevos puestos de trabajo en pequeñas obra de infraestructura social y servicios comunitarios”. Y agrega que “desde el Gobierno nadie los consultó sobre el bono de 1000 pesos”. El otro punto por el que reclamará la CTEP es que “hay pagos retrasados en el Plan Argentina Trabaja y que aún no hubo actualizaciones en los montos que se pagan”, expone Grabois.

Atado a las respuestas que consigan de parte del ministerio, y en caso de no satisfacer los pedidos, desde BP adelantaron que contemplan pedir bolsones de alimentos a los supermercados.

Ambos dirigentes, Menéndez y Grabois, coinciden -y lo pedirán a sus interlocutores- que la mesa que se iniciará este miércoles continúe más allá de lo que quede del año.

En los barrios de emergencia hoy por hoy conviven muchos actores y de difícil control: narcos, barrabravas, punteros ya sea peronistas o radicales, piratas del asfalto, la izquierda radicalizada, los movimientos sociales y la parroquia. La estrategia del Gobierno apuntaría a sentar en la mesa de diálogo a los dos referentes de mayor peso entre los humildes.

Por: Pablo Maradei