Alicia Chamorro estuvo casi un año de novia con Martín Romañach sin saber nada de su pasado. Durante ese tiempo fue víctima de sus golpes, malos tratos y violaciones. Hasta que quedó embarazada y empezó a sentir la necesidad de alejarse de esa persona que le hacía mal. Fue entonces cuando él dijo una frase que a ella le prendió una luz de alerta. Se le ocurrió buscar su nombre en google y así supo que el papá del bebé que estaba esperando era un femicida.
Habían pasado ya dos años de la muerte de Ornella Ragno y el caso ya estaba prácticamente cerrado. Aunque Romañach fue investigado, la carátula era “averiguación de causas de muerte de una joven”. El testimonio de Alicia fue la clave para darle un nuevo impulso y en los próximos meses, finalmente, el acusado irá a juicio por homicidio agravado por violencia de género. Sabe que podría haber sido su nueva víctima pero se salvó y ahora busca que se haga justicia por Ornella.
Romañach apareció en su vida en mayo de 2015. Le mandó una solicitud de amistad en Facebook y como tenían a unas compañeras del colegio secundario en común, lo aceptó. En la primera cita que tuvieron, él le contó su versión de un episodio que había marcado su vida. “Me dijo que una vez invitó a la casa de su abuela a una chica, que tomaron algo en la terraza, y que cuando iban a tener relaciones sexuales se enredó con los pantalones y se cayó. Hasta ese momento no sospeché nada”, le explicó al portal BigBang.
No pasó mucho tiempo sin embargo en que surgieran las primeras peleas. Al principio, los motivos eran los celos de él y la falta de tiempo para verse. Pero después vinieron los maltratos físicos. Le mordía los brazos y los pechos hasta hacerla sangrar. Ella le decía que le dolía y él respondía que era para que los demás supieran que era suya. “Era un cadáver, un cuerpo golpeado. Una muerta en vida”, sostuvo la joven.
No le permitía ver a sus amigas, no la dejaba arreglarse para salir. Todo el tiempo la acusaba de engañarlo y esa era su excusa para golpearla todavía más. La mordía, le pegaba, también llegó a drogarla. Pero cuando supo que estaba embarazada, lejos de mejorar la relación se puso más violento. Le mutiló la vagina.
La noche de su cumpleaños fue la noche que cruzó el límite. Como no quiso tener relaciones, trató de ahorcarla. Ella se puso a llorar y fue ese el momento en que él le gritó: “Vos también te vas a poner a llorar”. Todas las fichas se acomodaron de repente para Alicia con esa frase. En las siguientes 48 horas descubrió la historia de Ornella en internet, contactó a su familia y les contó lo que había vivido. Ellos la acompañaron a declarar por primera vez al juzgado.
El abogado querellante Néstor Pardal dice que con el cambio de carátula, la pena esperada es la condena perpetua. “No tiene escapatoria. Las pruebas son contundentes. Logramos recuperar muestras de ADN que habían desaparecido. Tras distintos exámenes se descubrió que era sangre de Romañach, lo que denota que Ornella se defendió”, explicó.
El crimen de Ornella
La relación entre Ornella y Martín también había nacido a través de la red social Facebook. El 10 de febrero de 2013 la invitó a tomar algo al departamento que su abuela tenía en Lanús, que estaba deshabitado.
Esa noche, por razones que nunca quedaron claras, la joven de 20 años cayó desde la terraza del edificio, desde la altura de un octavo piso. Algunos testigos que declararon en ese momento dijeron haber visto a un hombre yéndose del lugar. Era Romañach, que a la policía le explicó que Ornella se había tropezado y por eso cayó.
