La gran expectativa del primer trasplante de útero en Estados Unidos llegó a su fin el mes pasado luego de que fallara a causa de una infección que afectó el suministro de sangre al órgano nuevo, según anunciaron los médicos que intervinieron en la cirugía.
El trasplante fue realizado a finales de febrero, pero el útero donado tuvo que ser retirado el 8 de marzo, justo un día después de que la paciente de 26 años de edad, Lindsey McFarland, hiciera pública su historia.
La infección que padeció fue causada por Candida albicans, un hongo común que causa infecciones por levaduras. El doctor Andreas Tzakis, director del programa del centro de trasplantes del la Clínica de Clevelan, dijo que el hongo no suele causar infecciones uterinas y que la combinación entre los fármacos inmunosupresores y la cirugía invasiva probablemente contribuyeron a la infección.
Lindsey se enteró a los 16 años que no podría concebir niños, y hoy tiene tres hijos adoptados con su marido. Los informes indicaron que se encuentra bien de salud. “Que ella esté bien se debe a su fuerza de carácter y al cuidadoso proceso de selección de los pacientes que se realiza en la clínica ya que seleccionamos a aquellas mujeres que creemos pueden manejar no sólo la cirugía sino las posibles complicaciones también“, dijo el doctor Tzakis.
“Se trata de una joven realmente maravillosa que tiene un fuerte apoyo de toda su familia. No se podría haber esperado una mejor respuesta por parte de ella”.
El especialista hizo hincapié en que a pesar de la infección, consideró que el trasplante de útero es “un éxito” alentador. “Quedó claro que técnicamente estos trasplantes son posibles”, dijo.
Y al menos los antecedentes así lo demuestran. En septiembre de 2012 nació en Suecia el primer bebé del mundo engendrado en un útero trasplantado. Hoy ya son cinco los nacidos gracias a este procedimiento, que posee como único objetivo lograr la maternidad natural en mujeres sin útero.
Argentina dará el primer paso en Latinoamérica
Argentina no está afuera de esta práctica que puede darle la posibilidad a una mujer de lograr la maternidad cuando carece del órgano esencial para la gestación.
El doctor Kato Mastai (MN: 56066), jefe de la Unidad de Trasplante del Hospital Alemán, dijo aInfobae: “Hemos empezado a desarrollar un programa de trasplante de útero en nuestro hospital. Es un enorme desafío ya que se necesita de muchas capacidades diferentes. En un primer momento hemos incorporado dos ginecólogos y un cirujano de trasplante para resolver los problemas quirúrgicos. Es nuestra intención enviarlos a Suecia en los próximos meses.”