Cuando tenía apenas un año y medio, a Bradley Lowery le descubrieron un raro cáncer llamado neuroblastoma, que ataca al sistema nervioso. Este viernes, a los seis años, murió.
Bradley era fanático del Sunderland y se convirtió en la mascota del equipo, hasta hacerse gran amigo de Jermain Defoe, figura y capitán el equipo, quien asistió al cumpleaños del pequeño hace apenas una semana.
En los últimos meses su historia se hizo muy conocida y fueron muchos personajes de la Premier League los que se acercaron para conocer al nene, y todos ellos y sus clubes lloraron su partida este viernes.
Today, the football world lost one of its bravest fans.
Rest in peace, Bradley Lowery. pic.twitter.com/x3dhF7yvaO
— FIFA.com (@FIFAcom) July 7, 2017
Horas después de su muerte, el Sunderland jugó un amistoso ante el Bury y el estadio entero llenó el aire con un minuto de aplausos para recordarlo, que seguramente le llegaron al cielo desde donde Bradley vio el partido.