Escándalo por doping positivo: excluyeron de Río 2016 a los atletas rusos

El Comité Olímpico Internacional (COI) apoyó la determinación de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) de apartar a los atletas rusos de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro a causa de los numerosos casos de doping positivo en que han estado involucrados.

La declaración oficial emitida por el comité indica: “El COI celebra y apoya la postura consecuente de la IAAF. Es coherente con la política de tolerancia cero que desde hace mucho tiempo persiguimos”.

La IAAF decidió ayer mantener la suspensión a la Federación de Atletismo Rusa (FAR) por los numerosos casos de dopaje en los que se han visto involucrados atletas rusos, a los que la decisión deja fuera de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

La comisión ejecutiva del COI, organismo con sede en la ciudad suiza de Lausana, hizo hincapié en que “respeta plenamente la posición de la IAAF, subrayando que “la elegibilidad de los atletas en cualquier competición internacional, incluyendo los Juegos Olímpicos, es un asunto que compete a cada Federación Internacional”.

La exclusión de los competidores rusos de los Juegos Olímpicos de Río es una decisión inédita en la historia del deporte mundial y fue tomada por unanimidad por los 26 miembros del Consejo de la IAAF reunidos en Viena, Austria.

La Federación Rusa fue suspendida en forma provisional el año pasado después de que una comisión independiente de la Agencia Mundial Antidoping (AMA) presentara un informe de 323 páginas sobre el doping sistemático en el atletismo del país.

El Ministerio de Deportes ruso mostró su “profunda decepción” por la decisión, pidió que se revea la postura de excluir a los atletas de los Juegos de Río y afirmó que el país hizo todo lo que le solicitó la IAAF en la lucha contra el doping.

Sin embargo, el estudio que la IAAF le encargó al especialista noruego Rune Andersen informó que la “profunda cultura de tolerancia hacia el doping no se ha modificado hasta el momento” en Rusia, que todavía no cuenta con una “efectiva infraestructura capaz de detectar y desterrar el doping”.

Además, consideró que “hay sobradas denuncias de que las autoridades rusas, lejos de apoyar los esfuerzos antidoping, han encubierto casos adversos”.