Un desafortunado hombre de Johannesburgo, Sudáfrica, sufrió el dolor de su vida al colocarse un anillo de compromiso en el pene como parte de un juego erótico con su pareja.
Con 28 años de edad, no pudo quitarse la sortija del miembro y sus familiares tuvieron que conducirlo al hospital más cercano, donde los médicos se vieron obligados a aplicar perforaciones en el pene para liberar la sangre almacenada.
Así, la hinchazón disminuyó y pudieron retirar el anillo a través de la aspiración, pero su recuperación requirió antibióticos y analgésicos durante tres días, según informa sdpnoticias.com.
“Su pene estaba muy hinchada y azul. El paciente informó que se había aplicado el anillo cuatro horas antes por razones eróticas”.