Empresas alemanas prometen invertir en Argentina

Las compañías radicadas en Argentina apuestan a la energía eólica y al crecimiento del sector automotriz. La canciller alemana llegó con una decena de presidentes de compañías.

La agenda de la canciller alemana, Angela Merkel, en el país, comenzó con una reunión con empresarios en el hotel Alvear. Las compañías radicadas en Argentina aprovecharon ese encuentro para enviar un mensaje de confianza al gobierno de Mauricio Macri: prometen más inversiones y la creación de puestos de trabajo, aunque fijan sus expectativas en 2018.

La Cámara de Industria y Comercio Argentino-Alemana difundió una encuesta en la que el 56 por ciento de las firmas de origen germano radicadas en el país anticipó inversiones para el año próximo. La mayoría, el 71 por ciento, estimó desembolsos módicos, de hasta 5 millones de dólares, pero un 11 por ciento prevé invertir más de 100 millones de dólares.

Si bien buena parte de las inversiones irán a incorporar tecnología, el 53 por ciento de las firmas consultadas se prepara para incorporar personal. Participaron de la encuesta 50 compañías con ventas por más de 120 000 millones de pesos y 20 000 empleados. Entre ellas, automotrices, laboratorios (Bayer), firmas químicas, de tecnología y de energía.

Pablo Si Si, presidente de la sede argentina de Volkswagen y de la cámara que nuclea a las empresas de origen germano, dio una entrevista a la agencia alemana DPA. ¿A qué sectores apuntan los inversores de ese país? “El número uno es el de la energía sustentable”, afirmó. Buena parte de la generación eléctrica de alemania es eólica. La solución de conflictos financieros (la regularización de la deuda con el Club de París y el pago a los fondos buitre) abrió líneas de créditos blandos en Alemania que las multinacionales de esa potencia pueden usar para invertir en Argentina. Otros sectores que miran con atención las empresas de origen alemán son la infraestructura y la agroindustria.

Las cámaras empresarias que conectan dos países suelen ser una fuente de información de primera mano para los gobiernos de esos estados. Por eso, las palabras de Si Si cobran relevancia, a la hora de esperar inversiones. “Le estamos dando crédito al Gobierno argentino porque está combatiendo la inflación, que es el mal número uno. Bajar del 41 por ciento con que terminó 2016 a un 21 o 22 por ciento en que puede cerrar 2017 es un avance”, dijo Si Si a la agencia de noticias alemana. “En un año electoral como el actual, aplicar una política para aumentar las tasas de interés y así bajar la inflación es una muestra de coherencia”, sostuvo.

 

Sus palabras contrastan con la visión de aquellas empresas que esperan los resultados de la contienda electoral de octubre para definir inversiones. “Tenemos que integrarnos al mundo, pero no podemos hacerlo salvajemente, porque de lo contrario nos vamos a quedar sin industria ni empleo”; dijo Si Si.

El estudio de la camara de empresas alemanas reaviva la expectativa de una visita que está más enfocada en lo político que en lo económico. Sobre todo luego de la decisión de Estados Unidos de abandonar el acuerdo climático de París. Merkel, líder de Europa, busca aliados para jerarquizar el rol de la Unión Europea en un viaje que también tendrá una escala en México.
Alemania es, claramente, la potencia de Europa. Su imponente bloque industrial garantiza a esa economía superávit comercial con cualquier país del mundo. Argentina no es la excepción, ni mucho menos. Según datos que compiló la Cámara Argentina de Comercio (CAC) del Indec, la balanza comercial fue deficitaria para nuestro país en 1781 millones de dólares.

Alemania es el cuarto socio comercial, detrás de Brasil, Estados Unidos y China. El año pasado, las importaciones totalizaron u$s 3053 millones, principalmente de máquinas, aparatos, material eléctrico y partes, por un lado, y productos químicos, por otro. Las exportaciones, de u$s 1272 millones, estuvieron lideradas por animales vivos. Los otros rubros más vendidos fueron alimentos y productos minerales.