Comer yogur podría ayudar a tener huesos más fuertes.
Investigadores en Irlanda monitorearon a 4310 adultos de 60 años y mayores para recopilar datos sobre su dieta y estilo de vida por medio de cuestionarios. Después midieron la densidad ósea de los participantes y el deterioro de las articulaciones con rayos X y resonancias magnéticas, así como su habilidad física. El estudio resultante fue publicado a principios de mayo en Osteoporosis International.
Después de controlar las diferencias en edad, actividad física, si eran fumadores, el consumo de alcohol y otras características de salud y comportamiento, los investigadores encontraron que quienes comían yogur tenían una densidad mineral ósea entre tres y cuatro por ciento mayor.
En comparación con quienes no comían yogur, los hombres que lo hacían diariamente tenían un riesgo 39 por ciento menor de desarrollar osteoporosis y las mujeres tenían un riesgo 52 por ciento menor. Los participantes que comían yogur también tuvieron mejores resultados en pruebas físicas.
El autor principal del estudio, el investigador de Trinity College Dublín, Eamon Laird, dijo que esta investigación se hizo a partir de observación, por lo que no comprueba la causalidad.
Aun así, destacó, “el mensaje principal es que el yogur es una buena fuente de micronutrientes, vitaminas D y B, calcio, así como de proteína y probióticos. Pensamos que es la combinación de esas cosas lo que le da un efecto beneficioso”.
Hizo notar que otros productos lácteos no tienen un efecto similar y advirtió que muchos yogures tienen cantidades altas de azúcar, “entonces hay que ser cuidadosos”.