El Gobierno da examen en el Congreso sobre el acuerdo con Gran Bretaña por Malvinas, que despertó el rechazo de legisladores oficialistas y opositores.
Desde las 10, el vicecanciller Carlos Foradori, segundo de Susana Malcorra, se presenta ante la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, que preside Elisa Carrió, líder de la Coalición Cívica-ARI y socia de Cambiemos.
El funcionario es indagado acerca de la declaración conjunta que el Gobierno firmó el 13 del mes último con el vicecanciller británico Alan Duncan sobre Malvinas. El acuerdo propone avanzar en la reanudación de los vuelos del continente a las islas Malvinas y la explotación conjunta de pesca e hidrocarburos en la zona marítima del conflicto.
“Tenemos la camiseta argentina puesta, que nadie dude sobre esto”, resaltó el funcionario en su primera intervención ante los legisladores. Previo a las preguntas, Foradori defendió la declaración bilateral y dijo que el Gobierno es “muy consciente de la necesidad de defender los intereses nacionales”.
El vicecanciller afirmó también que la política oficial en torno a Malvinas “no es una aventura de este gobierno” sino que se trata de “instancias que se vienen dando históricamente”.
Luego fue el turno de los cuestionamientos por parte de los legisladores, en medio de chicanas políticas y discusiones por el tiempo para hablar entre los miembros de la comisión. En el debate los legisladores ratificarían “el rol insoslayable” del Congreso “en la adopción de medidas de política exterior” referidas a las Islas Malvinas.
La semana pasada los diputados remarcaron la potestad de decisión del Parlamento “puntualmente en materia de pesca, hidrocarburos, navegación y aquellas que afecten lo establecido en la primera disposición transitoria de la Constitución Nacional, que dispone la reafirmación permanente de la legítima e imprescriptible soberanía de la República Argentina sobre las Islas Malvinas”.
La oposición también cuestionaría al presidente Mauricio Macri por su error de haber dicho que había hablado sobre la soberanía de las islas en su diálogo casual con la primera ministra británica Theresa May, la semana pasada en Nueva York. El jefe de Estado tuvo luego de autodesmentirse.
Y le reclamaría a la canciller Malcorra que se aleje del cargo hasta que se resuelva la votación para la Secretaría General de las Naciones Unidas (ONU), cargo al que aspira la ministra.