Durante la primavera, los amores y encuentros inesperados se potencian, generando una gran oportunidad para el disfrute y la felicidad. ¿Por qué? El calor y la poca ropa ayudan, pero… hay más.
A buen tiempo… revolución hormonal
El estado de ánimo de las personas está en gran parte condicionado por la cantidad de luz que el cuerpo recibe por día. La primavera que trae los días más luminosos y más largos provocan un natural aumento de la serotonina, llamada “la hormona del placer” o “la hormona del humor”.
El placer sexual y el orgasmo son expresiones corporales que también aumentan la serotonina, provocando un agradable estado de placer y tranquilidad.
Energía y más ganas
A las respuestas naturales del organismo, se suman las ganas de aprovechar los días lindos y soleados. Espontáneamente surgen las ganas de mover el cuerpo y aumentar la actividad, lo que probablemente disminuya la ansiedad y quizás la pesadez que muchas veces queda de los meses más fríos y grises.
Sentirse en forma y más despierto suele aumentar considerablemente los encuentros sensuales. Erotizarse embellece, y sentirse bien con uno mismo te conecta más fácil con la seducción y el sexo. Es un agradable círculo que vale la pena aumentar y potenciar. Mantener girando esta saludable retroalimentación es el desafío para esta temporada.
Tres ideales de primavera
• Sexo y naturaleza: Los días agradables son una excelente ocasión para hacerlo al aire libre. El vértigo en un espacio público, pero bajo la protección de los arboles del bosque en plena Capital, pueden cambiar la experiencia. Para un encuentro completo o aunque más no sea para la previa, la excitación en plazas y parques es una ocasión para transportarse al calor sexual adolescente, cuando esos escenarios eran los espacios más cercanos y urgentes para el amor.
• El vestido sin ropa interior: Atuendo ideal para la primavera, agradable temperatura y vientos tibios. Caminar por la calle será distinto. No le avises hasta que ya estén afuera. Una sorpresa en plena salida, enriquece el programa con un detalle que tu pareja no esperaba.
• En el agua… para más placer: El agua, ideal en el buen tiempo y afrodisíaco. Hacerlo bajo el agua, ofrece una previa diferente: el peso es siempre liviano y te sostienen distinto… La piel, húmeda y resbaladiza, toma mayor protagonismo, los estímulos táctiles se potencian: y la intimidad se vuelve más lúdica, saliéndose de la rutina y de la cama.
¡Qué la primavera te erotice!
Licenciada Patricia Safadi, psicóloga y sexóloga.
