Gianni Infantino es el responsable de cambiar el semblante de un ente manchado por la corrupción como la FIFA, desde que fue elegido como presidente. El italiano reemplazó a Joseph Blatter, quien quedó en el ojo de la tormenta por la enorme cantidad de irregularidades durante su gestión, incluyendo sobornos, amaño de partidos y sedes de los torneos más importantes del mundo, con los votos, dinero y poder como moneda de cambio.
En la retina de todos quedará la imagen del suizo, cuando tuvo que partir abruptamente mientras brindaba una conferencia de prensa en la que fue escrachado: en símbolo de protesta, le arrojaron dólares falsos por las innumerables denuncias recibidas y el jugoso salario que percibía por ser el mandatario de la Federación Internacional.
Ahora, mientras trata de transparentar las cuentas y acomodar al organismo máximo del deporte más popular del mundo, Infantino reconoció cuánto dinero cobra por ser presidente, en diálogo con el medio francés Le Parisien.
“Es una suma muy importante, pero gano cuatro veces menos que mi predecesor”, confirmó el oriundo de Suiza, quien se naturalizó por la ascendencia de sus padres. Son casi 1.500.000 dólares los que percibirá por cada año de gestión, una cifra semejante a 23 millones de pesos.
Por su parte, la diplomática senegalesa Fatma Samoura, quien se desempeña como secretaria general, embolsará más de 1.300.000 dólares.