Fuentes oficiales citadas por la agencia AFP sostienen que el Mercosur aplazará hasta agosto, tal como quería Brasil, el traspaso de la presidencia pro témpore, actualmente en manos de Uruguay y que debía recaer en Venezuela.
En la reunión de cancilleres de Uruguay y Paraguay y de los vicecancilleres de Brasil y de la Argentina, que tendrá lugar en Montevideo este lunes, será aprobada la moción brasileña, aseguraron fuentes que participarán del encuentro y que pidieron el anonimato.
Uruguay se había mostrado reticente a postergar el traspaso del comando de la agenda del bloque regional a Venezuela. Pero finalmente, según los informantes, aceptará que la decisión se postergue hasta agosto, como pidió Brasil, enfatizaron.
Paraguay y Brasil se oponen a que Venezuela asuma la presidencia del bloque. En una breve visita a Montevideo la semana pasada, el canciller del gobierno interino brasileño, José Serra, había indicado que presentó a su par uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, esa propuesta.
Serra manifestó, además, “preocupación” por la situación en Venezuela, cuya canciller, Delcy Rodríguez, acusó a Brasilia de fomentar una “conjura” para evitar que Maduro asuma el puesto.
El ministro uruguayo, a diferencia del brasileño, no compareció ante la prensa, y en un escueto comunicado emitido dos días después del encuentro con Serra, reiteró su voluntad de entregar la posta al Gobierno de Nicolás Maduro.
Paraguay, por su parte, no acepta el traspaso de la presidencia pro témpore del bloque regional a un Estado cuyo Gobierno -alega- “está buscando el cierre de un poder del Estado a través del Supremo Tribunal de Justicia, el cierre de la Asamblea Nacional, que es la voz del pueblo”, declaró su canciller, Eladio Loizaga la semana pasada.
Del lado argentino, en declaraciones reproducidas por el diario La Nación, el presidente Mauricio Macri dijo en Bruselas: “Nosotros vamos a presidir los meses que vienen por delante el Mercosur”.
Macri le había dicho al diario español ABC que el Gobierno venezolano de Maduro “ha violado todos los derechos humanos” y “llevado a la hambruna y el abandono a la población venezolana. Por eso necesitan un referéndum, necesitan ir a elecciones lo más rápido posible”.
Así, el Gobierno de Tabaré Vázquez parece haber quedado en solitario en su decisión, y Brasil ha ganado la pulseada.
El Ejecutivo uruguayo se encuentra bajo fuerte presión de algunos sectores del partido en el Gobierno, el izquierdista Frente Amplio, para que entregue la presidencia a Venezuela y cumpla de ese modo con la normativa vigente en el Mercosur, que señala una rotación semestral de la presidencia pro témpore del grupo.
El Mercosur suspendió su cumbre presidencial de julio en medio de una nueva y profunda crisis del bloque regional fundado en 1991, al que Venezuela ingresó en 2012 mientras Paraguay estaba suspendido.
La reunión de este lunes fue mantenida en un muy bajo perfil por el gobierno anfitrión. No hubo comunicado oficial sobre el evento ni confirmación sobre los participantes, el horario o lugar de la reunión.
Las fuentes consultadas por la AFP indicaron que esperan una reunión corta y una decisión rápida sobre el mediodía del lunes, aunque no descartaron que la presencia de la canciller venezolana en Montevideo pueda retrasar la adopción de una decisión.
Rodríguez, por su lado, agradeció en Twitter al “Frente Amplio la firmeza del presidente Tabaré Vázquez con el compromiso de traspasar la presidencia pro témpore del Mercosur a Venezuela”.
De concretarse la decisión brasileña, sería un golpe duro para el Gobierno de Venezuela de parte de sus socios del Mercosur, en momentos en que las críticas arrecian contra Caracas en el seno del bloque regional.
Queda por saberse si en ese caso Uruguay conservaría la presidencia hasta agosto o si sería la Argentina la que la ejercería, como insinuó Mauricio Macri.
La crisis estalló en un momento clave para el Mercosur, que negocia un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea, negociaciones de las que no participa Venezuela.