El INYM continúa sin cumplir con los yerbateros

Productores tomaron por la fuerza la sede del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) a media mañana de este miércoles y tenían previsto pasar la noche allí. El gobernador Hugo Passalacqua, el ministro del Agro Luis Garay y el presidente del INYM, Alberto Re, intercedieron en procura de descomprimir la situación.

Para los productores, los principales responsables por las irregularidades que señalan son los industriales, pero reconocen que nadie se anima a denunciarlos. Para el viernes está prevista una reunión con el directorio del instituto.

Llegaron en camiones y camionetas tapadas de polvo rojo. Tuvieron la previsión de estacionarse frente a las oficinas que el Inym tiene en Posadas bien temprano a la mañana. Es una mezcla de cabezas rubias y morochas que se unen en un solo reclamo: “Acá no están solo los productores, también están los tareferos, porque si al productor le va mal ellos no tienen trabajo”, explica una mujer de mediana edad que hace circular un tereré.

Los yerbateros volvieron a hacer sentir su disconformidad en Posadas y eligieron nuevamente al INYM como escenario para manifestar su indignación por los supuestos incumplimientos de los industriales. Desde hace más de un año los productores vienen afirmando que los molineros por regla general pagan por el kilo de hoja verde entre 2,50 y 3,50 pesos cuando el precio oficial de 5,10 y que además esos pagos se concretan con cheques diferidos a plazos de hasta 10 meses. Sin embargo esas versiones no dejan de ser supuestos, porque hasta ahora nadie formuló una denuncia concreta y todos los productores firman religiosamente lo que les indican los industriales.

La protesta ya estaba anunciada desde el viernes, cuando los funcionarios nacionales Luis Urriza y Santiago Hardie, ambos del ministerio de Agroindustria, desestimaron la posibilidad de otorgar un inédito financiamiento de 1.500 millones de pesos para levantar la cosecha. Desde temprano los productores anticipaban su llegada con fotos de una larga caravana de productores que se acercaba a la capital provincial, mientras tanto la Policía disponía un cordón de contención frente a la puerta del instituto yerbatero, lo que hacía presagiar el inicio de larga y tensa jornada.