La administración de Mauricio Macri prepara un “centro de reunión de información” que permita “tener una alerta temprana” sobre eventuales acciones terroristas. En tanto, comenzó a interactuar con Interpol en los pasos más importantes del país, informó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Bullrich enmarcó estas decisiones en “la preocupación cotidiana” de su cartera por la seguridad ciudadana, no por un hecho específico como el acontecido la semana pasada en Brasil, donde las autoridades detuvieron a diez personas que dieron indicios de estar perpetrando un atentado en el marco de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro que comenzarán la próxima semana.
“Estamos muy prevenidos junto con la AFI (Agencia Federal de Inteligencia) con un trabajo muy sustantivo, y con análisis de inteligencia con todos los servicios del mundo”, dijo en diálogo con el diario Clarín.
Respecto de los Juegos Olímpicos, la ministra ratificó que viajarán a Brasil efectivos de la Policía Federal, Gendarmería y Prefectura para tomar parte del operativo de seguridad que involucrará en total a 55 países en tareas de colaboración, inteligencia y patrullaje.
Según un especialista en cuestiones de seguridad consultado también por el matutino, “en agosto y por los Juegos, Argentina será un blanco secundario de Brasil, en donde estará puesta la atención mundial y es una gran vidriera para los terroristas. Pero por ser la cuna del Papa somos un blanco primario permanente. Esto lo sabe cualquier analista de inteligencia”.
Otra fuente requerida por el matutino, del ámbito de la Gendarmería, dijo por su parte: “No tenemos información o indicios evidentes de que puedan llegar a perpetrarse ataques, pero sí existen muchos factores que influyen a mantener una constante alerta”.
La coyuntura internacional, con eje en Europa, activó en todo el mundo las alertas anti terroristas y en los análisis que suelen realizarse se recuerda de Argentina los atentados a la Embajada de Israel (1992) y la sede de la mutual judía AMIA (1994), que al momento incluso están sin que se hayan esclarecido.