El Gobierno expresó su “enérgica protesta” ante el Reino Unido tras tomar conocimiento de los ejercicios militares en las Malvinas, que incluirán el lanzamiento de misiles desde las islas.
Como la canciller Susana Malcorra se encuentra en Roma junto al presidente Mauricio Macri, fue su segundo, el vicecanciller Carlos Foradori, el encargado de entregarle al embajador británico Mark Kent la nota de formal de protesta. En la misiva, el Gobierno condena los mencionados ejercicios y exige a Gran Bretaña que “se abstenga de realizarlos”. Asimismo, le informó a Londres “que pondrá en conocimiento de la situación al Secretario General de las Naciones Unidas”.
“El accionar del Reino Unido se contradice con el principio de solución pacífica de las controversias, apoyado unánimemente por los países de la región y que se refleja en el rechazo a dichas acciones militares, puesto de manifiesto en declaraciones de los países del MERCOSUR y la UNASUR”, indicó un comunicado difundido por la Cancillería.
El ministerio que encabeza Malcorra recordó que las Malvinas son un territorio “ilegítimamente ocupado por el Reino Unido”, que “desconoce las resoluciones de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales, que instan a ambos países a reanudar las negociaciones a fin de encontrar una solución pacífica y definitiva a la disputa de soberanía”.
La información sobre la realización de las maniobras militares surgió del Servicio de Hidrografía Naval (SHN), dependiente del Ministerio de Defensa de la Nación. El SHN dio cuenta de que el Reino Unido realizará un “ejercicio de armas” que incluye lanzamiento de misiles desde los mares circundantes al archipiélago.
La acción militar fue notificada por las fuerzas militares inglesas a las autoridades argentinas, consignó el organismo hidrográfico.
Las pruebas misilísticas se desarrollarán en el área marítima que es ocupada ilegalmente por el Reino Unido, y se hará efectiva desde el 19 hasta el 28 de octubre, entre las 11 y 23.