El sector del transporte de cargas sufre en forma directa el aumento del precio del gasoil. El insumo es vital para la actividad que viene observando una continúa caída en la cantidad de productos transportados.
En diálogo con El Territorio, Juan Aguilar Secretario de Relaciones Institucionales de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeaac), explicó las dificultades del sector.
“Nuestro sector que está atravesando una profunda retracción de los volúmenes de carga que tienen que ver directamente con la composición de nuestro costo y nuestros servicios. Estamos bajando tanto en toneladas como en kilómetros recorridos y esto golpea muy fuerte a la actividad”, indicó el directivo nacional.
Aguilar destacó especialmente el aumento constante del gasoil en el país como un condicionante que desalienta la actividad transportista.
“Desde el momento de la desregulación del mercado de combustibles hasta este mes venimos con aumentos de alrededor del 70 por ciento para un insumo (el gasoil) que impacta en el 35% de nuestro costo”, detalló.
Aguilar enfatizó que por la situación de crisis “hace 60 días pedimos que el Estado nacional declare la emergencia para nuestro sector. Hasta el día de hoy no hemos tenido ninguna respuesta y para colmo seguimos viendo como todos nuestros costos siguen aumentando”.
Según el último informe de la Fadeeac, de enero a agosto de este año el sector acumula subas del 29% en sus costos. En tanto si se toman los últimos doce meses los aumentos llegan a un 45%.
“Con la proyección de la suba del gasoil de cerca del 12% en septiembre, el Índice de Costos puede trepar a un 45% en los últimos doce meses, cinco puntos por encima de la proyección de la inflación. La magnitud del alza del combustible y la devaluación de la moneda agudizan la emergencia que atraviesa el sector”, detalló el reciente informe de la Fadeeac.
Según el estudio de los transportistas, en el transcurso de 2018, lideran los aumentos de costos material rodante (56,8%), costo financiero (47,3%) y lubricantes (46,6%), mientras que en el incremento desagregado en el año anterior lideraron los aumentos de costos peaje (42,2%), gastos generales (40%), patentes (35%) y costo financiero (29,7%).
Se recordó en tanto como agravante que el sector soporta una carga tributaria de alrededor del 40 por ciento.