Johan Huibers completó la construcción del arca hace ya cuatro años y hasta ahora sólo funcionaba como atracción turística.
Sin embargo, llegó el momento de ponerla a navegar y pretende hacer un viaje de más de 8.000 kilómetros, desde Holanda hasta Brasil, cruzando el océano Atlántico para difundir la palabra de Dios y el mensaje de la Biblia, informó el blog The Blaze.
La embarcación tiene capacidad para transportar a 5.000 personas al mismo tiempo, mide 125 metros de largo, 29 de ancho y 23 de alto, con un peso aproximado de 2.500 toneladas.
“El arca es una réplica interactiva e informativa, un centro cultural bíblico”, sostuvo Huibers.
Pero el holandés tiene antes otro reto por delante: conseguir los fondos necesarios para la travesía y es por ello que acaba de lanzar una ambiciosa campaña de microfinanciamiento (“crowdfunding”).
El plan del carpintero es transmitir el trayecto por Internet vía streaming. Ya adelantó que, si puede atravesar el océano Atlántico, visitará varias ciudades brasileñas y seguirá su recorrido por Buenos Aires, Montevideo, La Habana, San Francisco y Seattle.
“Quiero hacer preguntas a la gente para que vaya en busca de respuestas”, explicó Johan.
Según Abc.es, los más escépticos creen que el carpintero fracasará en su intento, pero también eran muchos los que le tomaban por loco cuando anunció su proyecto para erigir una copia exacta del arca de Noé.
