Estados Unidos decidió entregar a los jueces argentinos todos los archivos vinculados con los sobornos que pagó Odebrecht: nombres de funcionarios argentinos corruptos, números de cuentas, transferencias bancarias y hasta abrir sus bases de datos.
Esos datos, que son verdaderamente explosivos -y permitirían identificar directamenta varios ex ministros y funcionarios del kirchnerismo- , están en una dirección del Departamento de Justicia de los Estados Unidos encargadas de aplicar la Foreing Corrupt Practices Act.
La decisión la tomó el presidente nortemaericano, Donald Trump, que le instruyó al Departamento de Justicia (DOJ) de su país “ayudar a la Argentina, que es un país amigo”. La instrucción de Trump es una consecuencia inmediata de la buena relación que entabló con el presidente Mauricio Macri, cuando ambos se reunieron en Washington, y tuvo una consecuencia inmediata en los tribunales de Comodoro Py.
Los fiscales vuelven de Brasil sin nuevos documentos de Odebrecht
Además, la semana última, el ministro de Justicia, Germán Garavano, se reunió con el Fiscal General, Jeff Ssessions, uno de los tres ministros más importantes de los Estados Unidos y también, en la Casa Blanca, con Juan Cruz, director para Asuntos de Hemisferio Occidental en el Consejo de Seguridad Nacional de los Estados Unidos.
Por eso, ayer, el director de Relaciones Internacionales del Ministerio de Justicia, Eugenio Curia, sin que nadie lo advirtiera, visitó a tres jueces federales: Sebastían Cassanello, Marcelo Martinez de Giorgi y Sebastián Ramos, que llevan adelante las cuasas por la construcciión de la Planta de Aysa en Tigre y el Soterramiento del Tren Sarmiento. Curia les llevó la novedad y también les dio las claves que se negociaron en los Estados Unidos para poder acceder, en cuestion de semanas, a esa información.