El Pentágono informó que mediante un ataque aéreo con un drone asesinó a Hafiz Saeed Khan, señalado como el líder del Estado Islámico (EI)-Jorasán en Afganistán.
Khan era considerado el emir de la provincia de Levante-Jorasán, el área de operaciones de la organización Estado Islámico en Afganistán, Pakistán y Bangladesh.
El ataque se produjo, según dijo el vocero del Pentágono, Gordon Trowbridge, el 26 de julio en la provincia afgana de Nangarhar, en el este, cerca de la frontera con Pakistán.
Según Trowbridge, la muerte de Khan “afectará a los esfuerzos del reclutamiento de EI y interrumpirá las operaciones del EI en Afganistán y la región”.
El EI ha estado muy activo en la zona fronteriza entre Afganistán y Pakistán desde el verano de 2015, ocupando aldeas, atacando a las fuerzas de seguridad afganas y realizando ataques en Afganistán y Pakistán.
Estados Unidos, que mantiene cerca de 10.000 efectivos en el país, sigue apoyando con entrenamiento y asesoramiento a las tropas afganas ante los avances de los talibanes y del EI.
En mayo, un ataque aéreo estadounidense similar acabó en Pakistán con la vida de Mulá Mansur, el líder de los talibanes afganos.