Dos policías comunales de La Matanza murieron en las últimas horas al quedarse sin oxígeno luego de conectar sendos caloventores eléctricos a sus respectivas patrullas para contrarrestar el frío.
Un jefe policial informó a la agencia DyN que las víctimas fueron identificadas como Néstor Montiel, de 25 años, y Juan Antonio Argañaraz, de 41, ambos efectivos de la fuerza de seguridad de la Municipalidad de La Matanza.
Uno de los casos se registró en la calle Pedro Palacios, al 1300, en la localidad de Ramos Mejía, donde murió fue el efectivo Montiel. Según la fuente, el agente dejó varias horas encendido un caloventor que le consumió el oxígeno dentro el patrullero.
El otro caso ocurrió casi a la misma hora -también por la falta de oxígeno provocada al estar varias horas encendido un calentador eléctrico dentro del patrullero- en la rotonda Querandí, de Ciudad Evita, donde falleció Argañaraz.