“D’Onofrio no cumplió con su palabra”, lo señaló Hugo De León, dirigente de Nacional, por una diferencia en el pase de Viudez.
“D’Onofrio rompió todos los códigos”, se quejó el vicepresidente Ricardo Carloni por el intento de River de contratar a Víctor Salazar.
“No me gustaron las formas de negociación, hubo cosas que no se debieron hacer”, se mostró molesto Miguel Jiménez, vicepresidente de Racing por el pase de Luciano Lollo a River.
Marcelo Gallardo declaró que no estaba “intranquilo ni preocupado” porque la llegada de refuerzos se demoró más de lo esperado. Lo cierto es que antes de eso, hubo versiones que indicaban que el DT hasta estuvo dispuesto a renunciar por la demora en la concreción de las transferencias.
Mientras tanto, el presidente de River Rodolfo D’Onofrio, comenzó la búsqueda en una serie de negociaciones que le trajeron más de un dolor de cabeza.
Tanto que salió a defenderse de quienes criticaron las formas que empleó en el actual mercado de pases y enfatizó que “los códigos son para la Mafia”.
“A los jugadores no se los puede tener presos, para eso hay cláusulas de salida, pero algunos dirigentes se enojan”, argumentó D’Onofrio y definió que en su “vida” se rige “por valores” y “los códigos son para la Mafia”.
En ese caso puntual, el titular riverplatense se refería a las autoridades de Rosario Central, debido a las gestiones de los Millonarios tendientes a conseguir los pases de Víctor Salazar, Walter Montoya y Marcelo Larrondo.
Los dos primeros intentos, por Salazar y Montoya, fracasaron y ya dejaron tensas las relaciones entre los clubes. Pero la situación se complicó todavía más cuando Larrondo le informó al entrenador Eduardo Coudet de que el Montreal Impact iba a pagar la clásula de rescisión y los rumores cobraron fuerza acerca de que los canadienses se lo cederían a los de Núñez a préstamo con posibilidad de compra definitiva.
Eso no fue todo. River ya tenía acordado el pase de Tabaré Viudez a Nacional, de Uruguay. Pero tras la venta del colombiano Eder Álvarez Balanta a Basilea, de Suiza, intentó que en la transferencia se incorpore el nombre del defensor uruguayo Diego Polenta.
Hugo de León, mánager del club uruguayo se molestó por el cambio de posición de River en la negociación, al punto que la transferencia podría caerse. Además, el conjunto uruguayo dijo que no está dispuesto a ceder a Polenta si River no paga cinco millones de dólares.
En medio de tantos problemas, D’Onofrio desactivó los rumores de la posible venta de Lucas Alario: “Es intransferible para el cuerpo técnico y la comisión directiva. Por lo que, si vienen a buscarlo, no hay dinero que valga”, sentenció D’Onofrio, en declaraciones para Fox Sports Radio.