La última encuesta de Gallup, conocida hoy, muestra por primera vez a Donald Trump empatado con Hillary Clinton con un 37% de estadounidenses que tienen una imagen favorable de cada uno de ellos, mientras un 58% dice tener imagen desfavorable del candidato presidencial republicano y un 59%, de la demócrata.
Es la primera vez que se presenta este escenario de paridad en el año que lleva Gallup midiendo las imágenes de ambas figuras en paralelo. El empate en 37 se da luego de una caída de Hillary desde el 40% que tenía a comienzos de este mes, luego del escándalo de la filtración de e-mails del Comité Nacional Demócrata y de una trepada de Trump desde el 31%, en lo que los analistas conocen como el habitual “rebote post-convención”.
De cualquier modo, se trata de niveles bajísimos de popularidad para ambos candidatos presidenciales, que cuentan con mayores índices de rechazo que de aprobación.
El mismo análisis de Gallup indica que el discurso de Trump del jueves pasado en la Convención Republicana tuvo el menor impacto positivo histórico de los medidos por la consultora. De los nueve discursos previos, la mejor respuesta la obtuvo Barack Obama, con el 58% de los estadounidenses que lo consideraron “bueno” o “excelente”, y el peor lo había tenido Mitt Romney en 2012, con el 35% que lo aprobó. Las palabras de Trump apenas fueron consideras “buenas” o “excelentes” por el 35% de los encuestados.
Aún en ese modesto escenario, a Trump le alcanzó para escalar unos peldaños y alcanzar por primera vez a su rival en imagen positiva.