El hombre, de 54 años, caminaba por la calle con el arma colgada en la espalda y los vecinos, al advertir la situación, dieron aviso a la policía.
En la esquina de Aristóbulo del Valle y Del Valle Iberlucea, los efectivos de la comisaría 1° de Lanús detuvieron al individuo que portaba un fusil AK-47, el cual había sido adaptado para ser utilizado como un arma calibre 22 largo.
El hombre fue trasladado a la dependencia policial local y allí el sospechoso argumentó que le llevaba el arma a su psiquiatra. En ese momento, los uniformados llamaron a los familiares del detenido, quienes explicaron que el sujeto padecía trastornos mentales.
La Justicia le concedió la libertad al ex combatiente de Malvinas y ordenó abrir una investigación para determinar por qué el hombre tenía una autorización del Renar para portar armas si padece problemas psiquiátricos.