Chau al default”. Así consideró el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, la decisión de la Corte de Apelaciones de Nueva York de confirmar la sentencia del juez Thomas Griesa. “Es un paso más hacia la normalidad y el desarrollo”, celebró quien por estas horas ultima los detalles para dejar atrás uno de los capítulos económicos más largo de la historia nacional.
La Argentina, entonces, se dispone a hacer frente el 22 de abril a los US$ 8.000 millones reclamados por los fondos buitre en la Justicia de los Estados Unidos. Luego de que el Congreso aprobara el 30 de marzo la “Ley de normalización de la deuda pública y acceso al crédito público”, el Gobierno buscará emitir bonos por hasta US$ 15.000 millones.
Paul Singer lo hizo: el líder de los buitres consiguió que la Argentina pague US$ 8.000 millones.
La diferencia entre los US$ 12.000 millones permitidos por las cámaras de Diputados (165 votos a favor y 86 en contra) y Senadores (54 votos a favor y 16 en contra) y los US$ 15.000 demandados por el ministerio de Hacienda y Finanzas, será utilizada por el Gobierno para “acelerar el plan de infraestructura”.
DEL DEFAULT AL CRÉDITO
US$ 30.000 millones por año. Esos serían los miles de millones de dólares que podrían ingresar por año al país, según proyectó el presidente de la Bolsa de Comercio, Adelmo Gabbi, una vez que cancele su deuda con los fondos buitre. Es que la Argentina atrajo en 2010 el 3% de los US$ 908.000 millones de la inversión extranjera en países emergentes.
De todas maneras, las provincias no pueden depender de las promesas del sistema financiero. Por caso, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal colocó el 9 de marzo un bono por US$ 1.200 millones con una tasa de interés del 9,125% anual a ocho años.
La inminente salida del default, espera el resto de los gobernadores, abarataría el acceso al crédito internacional. De hecho, la intención del gobierno de Mauricio Macri es lograr una tasa de interés cercana al 8% anual para el bono con el que esperan conseguir el efectivo necesario para pagarle al contado a los fondos buitre.