Después de casi tres semanas de audiencias y de la declaración de más de 50 testigos, se conoce el veredicto por el femicidio de Micaela García, la joven de 21 años secuestrada, violada y estrangulada en Gualeguay en abril pasado.
“Esperamos que los jueces actúen acorde a lo que solicitamos, con todas las evidencias que tenemos, estamos en condiciones de esperar una condena máxima”, dijo a Télam el abogado de la familia de Micaela, Jorge Impini. La sentencia del juicio, que fue oral pero no público, permitirá en cambio la presencia de la prensa.
El tribunal deberá resolver si condena a Sebastián Wagner, quien estaba en libertad condicional cuando ocurrió el hecho; y a Néstor Pavón, el dueño del lavadero de autos donde trabajaba Wagner, los dos acusados por los delitos de “abuso sexual con acceso carnal en concurso ideal con homicidio calificado por alevosía, criminis causae y femicidio”.
De ser declarados culpables, podrían recibir la pena de prisión perpetua. Distinto es el caso del tercer acusado e hijo de Wagner, Gabriel Otero, para quien tanto el fiscal como el abogado de la familia de la víctima pidieron la absolución por el “beneficio de la duda”.
Micaela fue secuestrada la madrugada del 1 de abril, cuando volvía a su casa en Gualeguay después de haber ido a bailar al boliche King. En el camino fue interceptada por un Renault 18 Break, cuyo paso quedó registrado por las cámaras de seguridad, en el que iban Wagner y Pavón que, según la declaración del primero, habían salido de “cacería”.
La subieron por la fuerza al auto, la violaron por turnos y la estrangularon. Su cuerpo desnudo lo descartaron más tarde en un descampado a dos kilómetros de la ruta 12. La encontraron una semana después.
