El fútbol argentino vive un momento de tensión y desorden institucional. Tiene a sus dirigentes divididos, duedas millonarias de los clubes con la Asociación del Fútbol Argentino, desorden administrativo y un conjunto de veedores que tienen bajo la lupa la situación financiera, económica y administrativa de la entidad de calle Viamonte.
En el medio de ese caos y en las últimas horas del lunes, la Inspección General de Justicia emitió una resolución en la que comunicó su decisión de suspender las elecciones a presidente de la AFA, y nombró a dos veedores, el abogado Luis Tozzo y la contadora Catalina Dembitzky, para que durante 90 días para lleven adelante una tarea fiscalizadora que tiene como fin analizar la situación económica, financiera e institucional a la Asociación que conduce Luis Segura.
Ante está situación anormal que vive la AFA y que afecta el orden institucional del fútbol argentino, la FIFA tiene una posición tomada. Su presidente, Gianni Infantino, no acepta ningún tipo de intervención del gobierno argentino.
Infantino fue claro cuando recibió un llamado desde Argentina para consultarle sobre la posición que tendría la entidad que preside. La FIFA no acepta ningún tipo de intervención del gobierno de Mauricio Macri. Lo único que hará será supervisar la transparencia de los comicios que se lleven adelante luego de la fiscalización que ordenó la IGJ.
Para seguir el conflicto de la AFA, Infantino designó al ex jugador de Milan y actual vicepresecretario general de la FIFA, el croata Zvonimir Boban. El ex futbolista será el encargado de monitorear todo lo que suceda con la situación interna de la entidad de calle Viamonte.
El presidente de FIFA arrastra varios conflictos desde que asumió su cargo el 26 de febrero. Con la tarea de limpiar la imagen de la Federación luego del escándalo de corrupción que terminó con la cúpula dirigencial presa, Infantino tiene varios frentes de importancia abiertos. Por eso decidió colocar a un hombre de su confianza para que siga el caso argentino de cerca.
Fuentes cercanas a Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, aseguraron que en una charla con Gianni Infantino, el nuevo mandatario de la entidad que nucléa al fútbol sudamericano le dijo al suizo: “No podemos tolerar un escándalo en el fútbol argentino”.
Después de la resolución de la IGJ, la AFA naufraga en la incertidumbre. El Comité Ejecutivo se reunirá esta tarde para tomar una postura con respecto a la suspensión de las elecciones y la llegada de dos nuevos veedores a la entidad.