El principal acusado por el crimen de Anahí Benítez, Marcos Esteban Bazán, denunció que policías de la UFI Avellaneda-Lanús lo amenazaron para que se declare culpable. Así lo informó su abogado, Lucio De la Rosa, quien también adelantó que va a pedir que se aparte a la Bonaerense de la investigación.
Durante un encuentro con su cliente, éste le dijo que por la noche lo llevaron a un despacho donde lo “intimidaron y amenazaron” para que se “hiciera cargo” del femicidio de la adolescente de 16 años y para que, además, renuncie a su derecho de tener una defensa.
Aunque aclararon que Bazán no fue golpeado, para De la Rosa fue víctima de “apremios ilegales”. “Este jueves me voy a constituir como querellante y Bazán va a declarar con detalles sobre los apremios. Y voy a pedir que la denuncia se incorpore al expediente por el homicidio”, sostuvo.
Ayer la policía encontró el teléfono de la víctima en una casa ubicada a cuatro cuadras del lugar donde encontraron el cuerpo en el predio de la reserva Santa Catalina. El aparato, aunque con otra línea, estaba en poder de un hombre de unos 40 años que quedó detenido.
