Corea del Norte y una nueva prueba de misiles que aumenta la tensión en la península

Corea del Norte lanzó este domingo desde el sur del país un misil que ha recorrido unos 500 kilómetros, apenas una semana después de haber disparado otro proyectil balístico de medio alcance que ha contribuido a incrementar la tensión en la península, informó el ejército surcoreano.

Corea del Norte lanzó este domingo desde el sur del país un misil que ha recorrido unos 500 kilómetros, apenas una semana después de haber disparado otro proyectil balístico de medio alcance que ha contribuido a incrementar la tensión en la península, informó el ejército surcoreano.

 
“Corea del Norte ha disparado un proyectil no identificado esta tarde desde un punto cercano a Pukchang, en la provincia de Pyongan del Sur”, afirmó el Estado Mayor Conjunto (JCS) en un breve comunicado.

En una comunicación posterior se especificó que el ensayo tuvo lugar a las 16.59 hora local y que el proyectil voló unos 500 kilómetros hacia el este, por lo que habría caído en el Mar de Japón (conocido en las dos Coreas como Mar del Este).

Portavoces del JCS explicaron a la agencia Yonhap que se está analizando el tipo de proyectil y su trayectoria, y descartan por el momento de que se trate de un misil balístico intercontinental (ICBM).

En tanto, el gobierno estadounidense difundió un comunicado en el que precisó que el misil utilizado hoy es de menor alcance que los utilizados en los tres últimos ensayos.

La misiva oficial, fechada en Riad donde se encuentra el presidente Donald Trump de visita oficial, indica que el proyectil es de medio alcance pero la distancia que puede cubrir es menor que la de los misiles usados en los tres últimos ensayos realizados por Corea del Norte.

La última vez que el régimen de Kim Jong-un hizo una prueba con este tipo de misiles fue el pasado febrero, según la nota.

Este ensayo se produce apenas una semana después de que Pyongyang lanzara el “Hwasong 12”, un nuevo misil de medio alcance que mostró importantes avances de cara a que el régimen de Kim Jong-un desarrolle en el futuro un ICBM con cabeza nuclear que pueda llegar a territorio estadounidense.

Los insistentes ensayos de armas de destrucción masiva de Pyongyang han endurecido la retórica de Washington tras la llegada al poder en enero de Donald Trump, cuyo gobierno ha insinuado la posibilidad de realizar ataques preventivos contra el gobierno de Pyongyang.

Los expertos consideran que con estos últimos ensayos el régimen de Kim Jong-un estaría poniendo a prueba al nuevo gobierno surcoreano del presidente Moon Jae-in, que llegó al poder hace menos de dos semanas con la promesa de mejorar los lazos con Pyongyang manteniendo al mismo tiempo el mecanismo de sanciones.