Corea del Norte criticó este domingo los ejercicios militares que inician este lunes Corea del Sur y Estados Unidos y advirtió que estas maniobras son como “echar gasolina al fuego” ante el actual ambiente de tensión en la península coreana.
En un editorial del Rodong Sinmun, el diario oficial del partido único norcoreano, el régimen advierte que “el ejercicio conjunto es la muestra más explícita de hostilidad contra nosotros, y nadie puede garantizar que el ejercicio no acabe tornándose en un combate real“.
Según agregó la cadena CNN, el editorial calificó a los ejercicios como un “comportamiento irresponsable” que podría llevar la situación “a la fase incontrolable de guerra nuclear“. Además, resaltó que las fuerzas norcoreanas pueden apuntar contra territorio estadounidense en cualquier momento y que ninguna porción del país podría “evadir el ataque sin piedad”.
“Si Estados Unidos fantasea con la idea de que una guerra en la península se situaría en el umbral de un país lejano al otro lado del Pacífico, está más equivocado que nunca“, añade el texto en referencia a los misiles balísticos de alcance intercontinental que el Ejército norcoreano probó con éxito el mes pasado.
Seúl y Washington inician el lunes en territorio surcoreano los ejercicios anuales UlchiFreedom Guardian, que incluyen la mayor simulación computerizada del mundo y que suponen el despliegue de decenas de miles de efectivos.
El ejercicio, que dura 12 días, se va a ejecutar después de que a principios de agosto se viviera la mayor escalada de tensión verbal entre Pyongyang y Washington que se recuerda en los últimos años.
Corea del Norte amenazó primero con atacar EEUU tras las sanciones de la ONU por sus últimas pruebas de misiles, a lo que el presidente estadounidense, Donald Trump, respondió con un tono inusualmente beligerante.
Pyongyang detalló entonces un plan para realizar un ataque envolvente con misiles sobre la isla de Guam, que alberga importantes bases estadounidenses, aunque luego aseguró que esperaría para ejecutarlo.
Las continuas pruebas de misiles que Corea del Norte ha realizado este año han incrementado la tensión en la península y endurecido el tono de Washington, donde el Gobierno Trump ha insinuado varias veces la posibilidad de realizar ataques preventivos contra el hermético país asiático.