Consejos para el riego de tu jardín

Tener una zona ajardinada en casa da mucho dinamismo al hogar, pero también implica una serie de cuidados que, de no llevarlos a cabo, pueden empobrecer seriamente la calidad de vida de lo plantado.

El riego de tu jardín es fundamental, por ello te acercamos los siguientes consejos.

Claves para mantener el riego de tu jardín 

Lo primero que tendremos que hacer es adaptarnos a las necesidades de las flores y plantas que hay en nuestro jardín. Por ejemplo, si tenemos especies que resisten el calor y no necesitan apenas agua, podremos pasarnos a regar apenas una o dos veces por semana.

No obstante, si tienes una gran variedad vegetal y floral con distintas necesidades, habrá que elegir un sistema de riego con el que no gastes más allá de lo necesario. Los más utilizados de bajo consumo son el riego por goteo y por aspersión.

El riego por goteo se trata, como su propio nombre indica, de ir gota a gota infiltrándose en las raíces a través de una serie de puntos de emisión. Este sistema gradual conlleva una alta frecuencia y control a la par.

Claves para mantener el riego de tu jardín

Por aspersión, el agua llega más esparcida a mucha más distancia del terreno. Así no hace falta tener tantos puntos de emisión, aunque no está tan controlado.

También hay que tener en cuenta la posición en la que ubicar las plantas para no tener que alimentarlas con más frecuencia de lo normal. Es decir, es importante colocar aquellas que necesiten más agua al borde del césped.

Tampoco hay que olvidar que la inclusión de árboles y arbustos dota de sombra y, por lo tanto, mayor humedad al espacio. Para éstos es recomendable un riego abundante y poco frecuente, ya que de esta manera resistirán mejor en las épocas de calor.

El uso de fertilizantes, cuanto menos se haga, mejor. Estos productos químicos producen más sequedad y empeoran el color.

Por otro lado, la hora a la que se riega es importante para ahorrar. Hay que procurar que sea cuando el sol no pega muy fuerte porque si no se puede evaporar más rápido, con lo que necesitaríamos echar más agua.

Claves para mantener el riego de tu jardín

Para finalizar, debemos eliminar cada cierto tiempo esa maleza del terreno, que además de perjudicar a aquellas plantas que están sanas, se lleva agua que no le corresponde.

Con todo esto, seremos capaces de mantener un jardín de lo más lustroso sin derrochar ni una gota de agua.