Aunque esos dibujos casuales no pueden dar cuenta exacta de quiénes somos, sí constituyen un indicador de algunos rasgos de personalidad, que se expresan inconscientemente. Preferimos unas formas más que otras, debido a que algunas de ellas reflejan con mayor fidelidad nuestras percepciones más íntimas.
“Escribir conscientemente es lo mismo que dibujar inconscientemente el dibujo de sí mismo, el autorretrato”
Hay que diferenciar los garabatos ocasionales de los permanentes. Los primeros son dibujos que se hacen un par de veces y jamás se vuelven a repetir. Los segundos corresponden a esos favoritos, que no nos resistimos a dibujar cuando tenemos al frente un papel. Estos últimos son los que dan cuenta de lo que llevamos dentro y quizás no conocemos.
Los trazos de los garabatos inconscientes
De acuerdo con la forma, presión y disposición de los trazos que componen esos garabatos inconscientes, se pueden determinar algunos rasgos de carácter y emociones o sentimientos que tal vez no han salido a la luz. Los principales significados son los siguientes:
- Trazos geométricos. Corresponden a figuras geométricas simples (triángulos, cuadrados, rectángulos, etc.). Si no tienen adornos o rellenos, nos hablan de personas que tienen reprimidos sus sentimientos y pretenden manejarlo todo a través de la razón. Si tienen sombreados, nos revelan a alguien que está en un proceso de flexibilización de sus convicciones. Si tienen secciones completamente negras y otras blancas, tienen que ver con personas que tienen dudas.
- Trazos rígidos o marcados con fortaleza. Cuando el trazo se imprime con gran fuerza o intencionalmente busca marcarse con la mayor perfección, lo que se revela es una persona angustiada, que se concentra excesivamente en sus problemas y tiende a ser obsesiva. Puede existir ira reprimida o sentimientos de agresividad que no se han identificado. Si el trazo casi rompe el papel, estamos hablando de alguien que está invadido de violencia.
- Trazos irregulares o en zigzag. Los trazos quebrados o en zigzag reflejan impulsividad. Personas que acumulan tensiones y luego las liberan intempestivamente. Por lo general se trata de personas bastante pasionales, que le dan una gran importancia al componente afectivo.
Las formas de los garabatos inconscientes
La forma que adoptan los garabatos es también un indicador del sentimiento o la percepción inconsciente que los motiva. Un adecuado análisis de estos dibujos pasa por el examen de los trazos, junto con la forma que adoptan. Según el tipo de dibujo, estos son los principales significados:
- Flechas. Todas las flechas, en general, revelan un componente agresivo. Nos hablan de personas dinámicas e impulsivas, con gran tendencia a la acción. Si las flechas van de izquierda a derecha, reflejan que la agresividad se proyecta sobre otros. Si van de derecha a izquierda, se dirige hacia sí mismos. Las flechas que se curvan identifican a personas que saben reagrupar sus fuerzas y dirigirlas hacia un logro.
- Espirales. Todos los espirales corresponden a personas que tienen un gran egocentrismo y, por lo tanto, les cuesta mirar más allá de lo que tiene que ver con sus propios intereses. Los espirales que terminan en el lado izquierdo muestran que hay una fuerte carga del pasado, que no se ha elaborado. Si terminan a la derecha, es señal de un gran miedo a la soledad, que se alterna con una intensa necesidad de ser sociable para romper su propio encierro.
- Estrellas y cruces. Los aficionados a dibujar estrellas revelan una gran necesidad de ser el centro de atención en su medio social. Pero si estas figuras tienen muchas puntas y dejan vacío el centro, lo que reflejan es depresión y tendencia hacia la melancolía. Las cruces, por su parte, nos hablan de alguien que tiene un gran sentimiento de culpa o experimenta una fuerte responsabilidad sobre sus hombros.
- Figuras de personas. Dibujar personas es una señal de que alguien se siente indefenso frente a los demás, o se percibe como si no fuera capaz de asumir las responsabilidades que tiene a su cargo. Esto es especialmente cierto si las figuras son muy pequeñas. Cuando las figuras de las personas son muy esquemáticas, tipo “bolitas y palitos”, lo que se refleja es una gran inseguridad, temor a que otros se acerquen y necesidad de encerrarse en uno mismo.