Desde la Dirección General de Vigilancia de la Salud de la República del Paraguay confirmaron que el virus del Zika puede generar aborto espontáneo y provocar la muerte del bebé al nacer.
La Dra. Águeda Cabello, directora general del área informó que los recientes casos que se registraron en Colombia, dan cuenta que el 50 por ciento de los casos de Zika en embarazadas producen aborto espontáneo y un cinco por ciento muere en el momento del parto.
Además afirmó que el virus diagnosticado en una embarazada puede ocasionar malformaciones y problemas neurológicos en el bebé. La profesional solicitó a las embarazadas que acudan a la consulta prenatal y tomen todos los cuidados necesarios para protegerse contra la amenaza de la enfermedad.
Ante la situación epidemiológica, la representante del Ministerio de Salud exhortó las mujeres que planean embarazarse, que analicen con su gineco-obstetra acerca de los riesgos al que se exponen si durante el embarazo contraen el virus. “No podemos decir a una mujer que desea embarazarse que no lo haga, pero recomendamos que lo analicen y si hay posibilidad de posponer que lo haga”, dijo la profesional. Declaró que interrumpir el embarazo por diagnóstico del Zika no es un procedimiento que se contempla ni está previsto en la legislación.
Recordó que toda mujer con cuadro febril es puesta en seguimiento con el acompañamiento de un equipo multidisciplinario, aunque aclaró que la fiebre puede estar ausente en el enfermo con Zika.
SíntomasLa presencia de exantema (erupción en la piel o sarpullido) es otra característica del Zika. Suele presentarse primero en la cara y luego se extiende al resto del cuerpo. La enfermedad puede estar acompañada igualmente de conjuntivitis, dolor muscular o en las articulaciones, o un malestar general que comienza entre 2 y 7 días después de la picadura de un mosquito infectado. Ante cualquiera de estos síntomas, consultar inmediatamente al servicio de salud más cercano.
Prevención
Cabello insiste a la ciudadanía respecto a las medidas de prevención basadas en la eliminación de criaderos y el uso de barreras de protección con la aplicación de repelente que contenga DEET, ropas mangas largas, mosquiteros y telas metálicas en las aberturas de las casas (puertas y ventanas), de manera a reducir el riesgo de picaduras de mosquitos