Se trata de Lorenzo Enrique, de 82 años, quien fue condenado por el Tribunal Oral en lo Criminal I de La Plata por el delito de “homicidio simple, con dolo eventual”, en un juicio realizado bajo modalidad de juicio abreviado.
Según se informó, Enrique está en libertad ya que debido a su edad avanzada se le concedió la excarcelación extraordinaria.
El hombre es propietario de un campo ubicado en la ruta 6 y calle Saladillo, de la localidad de San Vicente, donde había colocado un cerco perimetral electrificado con entre 120 y 230 voltios.
El 26 de enero de 2014, Pedro Quintana se hallaba junto sus familiares pescando en un arroyo que corre a la altura de la ruta 6, cuando al atravesar el alambrado recibió una descarga eléctrica que le ocasionó la muerte por “un paro cardiorrespiratorio por electrocución”.
El juez Claudio Bernard explicó que el imputado “con su conducta temeraria de colocar alto voltaje eléctrico en el alambrado de su campo sabía el riesgo que la empresa tenía en si misma, y esta actitud desaprensiva y extremadamente peligrosa, podía a mi juicio, causar la muerte de otra persona, como realmente sucedió”.
Remarcó que “si bien no puede hablarse de voluntad de causar el resultado muerte, si puede hablarse de indiferencia o aceptación de un riesgo jurídicamente desaprobado de colocar en el perímetro de su campo un alto voltaje eléctrico, con pleno conocimiento que la maniobra desplegada podía causar graves heridas mortales, dado lo agresivo y sorpresivo del accionar”.
