Desde sesiones de spa, pasando por festejos de cumpleaños hasta referirse a él como tu ‘bebé’ son algunas de las señales que indican que tu mascota se convirtió en “hijo”.
Para los amantes de los animales, las mascotas son miembros de la familia. Necesitan de afecto, atención y cuidado, sin embargo, algunas conductas podrían ser extremas. Mario Terrés, fundador de la comunidad en Facebook Perrhijos, explicó que eso es muy común entre personas jóvenes que aún no tienen hijos o han decidido no tenerlos (como la generación millenial) y adoptan este tipo conducta en relación a sus mascotas.
“Somos muchos los que tenemos un lazo distinto con nuestro perro. Ya no es una mascota, es un integrante fundamental de la familia”, comentó.
¿Cómo detectar que tu perro recibe exceso de atención?
Mi ‘bebé’: claro y contundente, su nombre de pila, quedó en segundo plano, y los apodos extremadamente cariñosos predominan. Sumado a eso, hablar bajito, agudo y en diminutivo.
La cama es su nueva cucha: dejó de ser un espacio de ambos para ser el lugar de tu mascota. El intruso termina siendo el dueño. “A veces terminas durmiendo al pie de la cama para no incomodar, no se vaya a molestar”, puntualizó Terrés.
Sesiones de spa: su peso, figura, y aspecto es un tema primordial para su dueño. El presupuesto mensual -a veces mayor que el de su propietario- está destinado a peluquería en los ‘pet shops’, alimento específico y claro ropa especial para mimarlo.
Compañero de viaje: un fin de semana en la casa de amigos, una escapada romántica, un paseo por el río, cualquier destino es ‘espectacular’ si es pet friendly. De no ser así, “muchos eligen rechazar la invitación”, aclaró.
Fiestas de cumpleaños personalizadas: durante los primeros años los regalos eran un hueso o juguete en día de su fecha. Hoy la ocasión amerita un festejo, con amigos, gorros y torta de cumpleaños
Invadió hasta las redes sociales: Instagram, Facebook, Twitter o Snapchat, todos son perfectos canales para dar a conocer la increíble personalidad de tu perro. El 90% de las publicaciones son de tu perro, algunos hasta tienen usuario propio.
Una juguetería ‘perruna’: el hogar se convirtió en un espacio 100% animal: huesos, peluches, una colección de propuestas divertidas que nunca son suficientes.
Frecuentes pet dates: así como las mamás organizan encuentros para que sus hijos socialicen con los hijos de sus amigas, algo similar sucede en las citas de amistad perruna.