“Todos somos personas con riesgo de tener un tumor de cabeza o cuello”, afirma Marcos Pereira, oncólogo y radioterapeuta de la misma Unidad Funcional de Cabeza y Cuello del Instituto Oncológico Ángel H. Roffo.
Ocurre que, si bien el 75% de estos tumores aparecen en pacientes que son fumadores o consumen mucho alcohol, hoy existe otra causa frecuente que es el virus del papiloma humano (HPV), que es de transmisión sexual, agrega. Y frente a este último factor, cualquier persona que tenga sexo oral puede enfermarse.
De hecho, el doctor Raúl Giglio, médico oncólogo y jefe de Oncología de la Unidad Funcional de Tumores de Cabeza y Cuello del Instituto Roffo, señala que mientras que los tumores de cabeza y cuello vinculados al tabaquismo y a la ingesta de alcohol están en descenso gracias a las múltiples campañas de concientización y los cambios en las leyes en muchos países del mundo, la incidencia de tumores ocasionados por HPV está en aumento “en parte porque la sociedad y los hábitos sexuales de la gente han cambiado”.
Tanto es así también que cada vez se diagnostica a pacientes de más temprana edad. “Se ha constatado que muchos jóvenes se inician a muy temprana edad en la vida sexual con la práctica de sexo oral”, coincidieron Pereira y Giglio.
Por eso, este 27 de julio en el que se conmemoró el Día mundial del cáncer de cabeza y cuello (que incluye los tumores que aparecen en la boca, la laringe y la faringe), se buscó concientizar no sólo sobre la prevención con el cigarrillo y el alcohol, sino también con los cuidados respecto al HPV.
Según Giglio, el HPV ocasiona alrededor del 25% de los casos de este tipo de cáncer y está vinculado a prácticas de sexo oral sin protección. “Esto se da sobre todo en América Latina, aunque en Norteamérica y algunos países europeos es responsable en más del 70% de los casos”, agrega. Sin embargo, los especialistas son optimistas y creen que si con educación y políticas públicas se pudo controlar la epidemia de VIH, también puede lograrse en este caso.
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Si bien estos tumores no son de los más frecuentes, la gran mayoría se diagnostica en etapas avanzadas. Muchas veces esto ocurre dado que los síntomas suelen confundirse con otros factores, dado que éstos son: disfonías prolongadas, dificultad para tragar, úlceras o inflamaciones.
Por eso, los especialistas recomiendan consultar al médico lo antes ante cualquiera de estas manifestaciones física dado que cuanto antes se detecte, más posibilidades hay de curarse.
Al referirse al pronóstico de la enfermedad, Giglio puntualizó que cuando es diagnosticada en el estadio 1, “la chance de curación del paciente es de entre el 75 y el 90%”. En tanto que cuando el diagnóstico se hace en estadio 2, es de entre el 60 y el 75%; en el estadio 3, de alrededor del 50%; y en estadio 4, “son casos más complejos y el pronóstico es menos alentador”.
El cáncer de la cavidad oral, faringe y laringe corresponde a casi el 5% de todos los tumores malignos, que son casi 2 veces más frecuentes en hombres que en mujeres y suelen aparecer a partir de los 40 años.
