A la hora de entrenar, siempre queremos rutinas que nos hagan adelgazar fácil y estilicen el cuerpo de la mejor manera.
Te damos en esta nota algunas sugerencias para que pongas en práctica y actives tu rutina.
* Hacer una evaluación física previa. Antes de cualquier plan de entrenamiento, la prescripción de programa de ejercicios tiene que ser acorde a la persona. Hay que tener siempre en cuenta que una rutina inadecuada, puede ser hasta peligrosa para nuestra salud.
* Seguir un entrenamiento variado. Hacer siempre lo mismo, aburre y lleva a abandonar la actividad. Además nuestro cuerpo se adapta rápido a estímulos repetitivos. La recomendación: primero hacer lo hay que hacer y luego incorporar algo que nos resulte entretenido.
* Tener un descanso reparador. Es fundamental para estimular la liberación de la hormona de crecimiento, lo cual favorece el incremento de la masa muscular, la construcción ósea y la eliminación de grasas.
* Hacerse fuerte. El entrenamiento de fuerza permite aumentar y mejorar la calidad muscular y permite un descenso saludable. Además, previen la posibilidad de lesiones, da mayor estabilidad articular y más seguridad al movernos.
* Pensar en el entrenamiento invisible. Más allá del entrenamiento pautado, es fundamental sumar movimientos la mayor parte del día. El desafío es buscar excusas para moverse. Usar las escaleras, caminar unas cuadras en el camino de ida y vuelta al trabajo son algunas de ellas.