El gluten es un conjunto de proteínas que se producen de manera natural en el trigo, centeno, cebada y otras variedades híbridas de estos cereales, por lo que la mayoría de las personas comen alimentos que contienen esta proteína y la incorporan a su rutina alimenticia. La intolerancia al gluten se conoce como enteropatía sensible al gluten (ESG), celiaquía o enfermedad celíaca. Sin embargo, son cada vez más las personas no celíacas que se unen a la famosa dieta antigluten.
Se estima que un tercio de la población estadounidense ya eliminó de su dieta el gluten para incluir productos sin TACC: entre sus seguidores se encuentran Miley Cyrus y Victoria Beckham, y lo cierto es que hay varios beneficios probados de este tipo de alimentación, aunque no se recomienda comenzar una dieta de este tipo sin primero consultar con un especialista, ya que muchos cometen errores como eliminar todos los carbohidratos, y otros creen que los ayudará a bajar de peso.
La doctora Cynthia Sass es una nutricionista estadounidense y actualmente se desempeña como consultora para el equipo de béisbol de los New York Yankees. A continuación, la especialista revela algunos de los datos que se esconden detrás de conceptos erróneos que creen la mayoría de las personas sobre las dietas sin gluten:
MITO 1
Todos deberían comer sin gluten
Hay dos grupos de personas que deben sí o sí eliminar el gluten de su dieta. El primero está compuesto por personas celíacas. Si consumen gluten, incluso en pequeñas cantidades, pueden hacer que el sistema inmune se dañe y no se puedan absorber los debidos nutrientes, lo que puede llevar a dolores o fatiga. “Si uno es celíaco, la única forma de llevar una vida sana es cortar al gluten completamente”, afirmó.
El otro grupo está compuesto de gente que padece de sensibilidad al gluten no celíaca (SGNC), que puede causar sarpullidos, hinchazón, fatiga y mareos. No hay un test universalmente aceptado para determinar si el individuo tiene esta condición, así que en general es la persona la que debe probar sacar el gluten de su alimentación diaria y monitorear los avances.
Veredicto: El cuerpo de cada persona es el que debe guiar la alimentación.
MITO 2
Si uno no consume gluten, el cuerpo no va a tener nutrientes esenciales
El gluten en sí es un tipo de proteína, y esta puede obtenerse de todo tipo de comidas, por lo que es perfectamente seguro no consumirlo, incluso si ingerirlo no causa ningún malestar.Un plan de alimentación sin gluten bien ejecutado con la ayuda de un profesional puede ser una estrategia inteligente para mejorar la dieta. También implica comprar menos comidas procesadas.
Veredicto: El cuerpo no necesita el gluten.
MITO 3
Abandonar el gluten hace bajar de peso
“Cada vez que una persona elimina un ítem de su dieta, hay un peligro de que lo reemplace por otro que no sea favorable en su meta para bajar de peso”, destacó Sass. Es muy fácil comer muchos alimentos basura sin gluten como galletitas y papas fritas. Y algunos comienzan a comer porciones más grandes, bajo la creencia de que como es saludable no importa, y se olvidan de que las calorías siguen acumulándose igual.
Veredicto: Algunos pierden peso y otros no.
MITO 4
Hay que despedirse de los carbohidratos
Las papas, las batatas, el zapallo, las arvejas y las lentejas son todos alimentos sin gluten. “Con sólo reemplazar otras comidas por estos se puede alcanzar una dieta balanceada sin demasiados sacrificios“, explicó Sass. Además, ayudan en el consumo de fibras y proteínas, ofrecen una gran cantidad de antioxidantes, vitaminas y minerales.
Veredicto: No es un programa sin carbohidratos.
MITO 5
No se puede romper la dieta
“Lo que la mayoría de las personas me preguntan es si pueden cada tanto consumir algo de gluten, como comerse una porción de pizza. Mi opinión es que si uno hizo el cambio sólo para tener una alimentación más limpia, entonces ‘pecar’ cada tanto no está mal, a menos que lleven a síntomas que hagan que se sienta mal”, aseguró la experta. Sin embargo, los celíacos y los que tienen SGNC deben cuidarse por completo.
Veredicto: No hace falta ser estricto (salvo que se trate de un celíaco).