Cazandra Zetterberg, una joven sueca de 19 años, quiso bajar de peso pero su deseo se le fue de las manos y terminó cayendo en la anorexia.
Esta enfermedad hizo que la chica llegara a pesar solamente 30 kilos en el 2013 y todo empeoró cuando de un día a otro tuvo que ser trasladada de emergencia a un hospital debido a que su temperatura corporal disminuyó a los 34 grados centígrados.
Al año de haber estado al borde de la muerte, Cazandra comenzó a estudiar la carrera de nutrición y preparación física. Hoy en día no solo luce un cuerpo espléndido sino que además está muy bien físicamente. Por eso subió su historia a las redes sociales para ayudar a las demás jóvenes.