En el marco de la jornada “Argentina frente al debate de Naciones Unidas sobre el problema de las drogas” realizada hoy en el Congreso Nacional, la ministra admitió que la Argentina “es un país de importaciones en que la droga entra, se expande, se cocina, se transforma en materias más complejas y se exporta”.
Asimismo, consideró que “el aumento de las tasas de homicidios es directamente proporcional al crecimiento de la narcocriminalidad” y que el “ingreso” de la droga “es por la frontera norte”, refiriéndose a Bolivia, Paraguay y, en menor medida, Perú.
Por eso, alertó: “Si no lo frenamos ahora, podemos sufrir lo que otros países están sufriendo”.
También advirtió sobre el aumento del consumo interno de drogas, entre las que destacó la cocaína cuyo consumo, dijo, aumentó un 100 por ciento durante los últimos diez años.
Por último, reiteró el compromiso del gobierno en la lucha contra el narcotráfico: “Vamos a poner todas las fuerzas para que Argentina deje de estar en la situación en la que está. Si no lo tomamos con mucha fuerza y convicciones en este momento, podemos sufrir lo que otros países están sufriendo”.
El programa, llevado a cabo en el Salón Azul del Congreso, fue organizado de manera conjunta por el Senado, la Cámara de Diputados y el Inter-Parlamentary Union Interparlamentaire, y contó con la presencia de diputados y senadores nacionales y diferentes especialistas en la materia.